La noche del jueves volvió a ser mágica en el auditorio de
la ciudad autónoma de Ceuta. El espectaculo de Canal Sur ‘Se
llama Copla’ (que por cierto, repetía) llenó las gradas y
las mas de 500 sillas que se colocaron sobre el hormigón de
la caseta de un público agradecidoy que en ningun momento,
dejó de apoyar a sus copleros.
La copla pasó por el escenario central de la feria como un
huracán de voces y música andaluza, de canción española, de
grandes voces y de mejor colorido. Un concierto en el que
destacó la calidad de unas voces llenas de sentimiento y
potencia. Voces claras y con sabor a copla. Una calidad
sobre las tablas, trabajada a base de conocimiento de esta
modalidad en la que hoy por hoy, es tan difícil triunfar.
Pese a ello, pese a todas las dificultades que entraña el
saber interpretar la copla, como tal, los concursantes de
‘Se llama Copla’ triunfaron plenamente, llenando el
auditorio central con las mejores muestras del repertorio de
la copla de España. No resulta nada facil (y eso es un
hecho) cantar temas como ‘Capote de grana y oro’, ‘Maria de
la O’, ‘Ojos verdes’ y tantos y tantos otros, que durante,
aproximadamente, una hora y tres cuartos, desbrozaron entre
palmas y olés del respetable que, sin límite de edad, sin
condicionamientos de ningún tipo, llenaba el auditorio
central. Visto lo visto, pueden estar tranquilas las
Juanitas Reinas, Rocío Jurado, Concha Piquer y otras grandes
‘doctoradas’ de esta modalidad de cante porque la copla
sigue viva y reavivando casi todo lo que toca como si de un
remedio santo se tratase. El auditorio empezó a cantar desde
el primer momento y el ambiente se presentaba idoneo para la
ocasión; los integrantes del grupo sabian muy bien cual era
su cometido y salieron a darlo todo como si de una batalla
se tratase. Y batallaron de la mejor manera posible haciendo
de su voz y sus compases el armamento con el que combatieron
a los que congregados en los aledaños del escenario
observaban tales interpretaciones con asombro y sorpresa. El
concierto, un claro ejercicio de desparpajo y naturalidad,
llegó a convencer a los presentes de donde procedía el boom
que había recibido el propio concurso; y a decir verdad,
quedo bastante claro pues el espectaculo ofrecido no deja
lugar a debates sobre el origen de esta iniciativa. Un
público satisfecho y unos artistas entregados que salieron
entre risas del escenario son el resumen de una jornada de
feria en la que hemos devuelto aunque sea solo un poco la
copla al plano mas actual de nuestras tradicionales fiestas
patronales. Los concursantes de ‘Se llama copla’ terminaron
su actuacion alrededor de las 02:00 h. tras haber estado
prácticamente una hora y media sin parar de cantar en un
escenario que vivió una noche mágica dedicada a la
tradicional copla.
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