El Gobierno local “ha cerrado en falso” el expediente de las
cuentas con Urbaser y además los ceutíes todavía están
esperando que “depure responsabilidades” por los pagos
indebidos de 12,5 millones que ya ha reconocido. Estas
fueron las dos conclusiones con las que el secretario
general del PSOE, José Antonio Carracao, comenzó ayer su
intervención ante los medios de comunicación, en una
comparecencia en la que pidió al Ejecutivo que “deje sobre
la mesa” el expediente, que lo “siga instruyendo y encargue
a los técnicos que se documenten los gastos de explotación,
donde el PSOE ha encontrado posibles nuevos descuadres en su
“proyección de gastos obtenida a partir de la foto fija de
2003”. “Y si se solicita (este informe) al técnico que ya ha
ido avanzando sobre estas circunstancias probablemente todo
irá más rápido”, sugirió.
Carracao pidió al Gobierno que aclare también las cuentas en
relación con las “instalaciones que no están en las actas y
que son inversiones pagadas por la Ciudad y que Urbaser se
llevó” y, en el caso de la maquinaria incorporada en 2009,
que no figura tampoco, según Carracao, en las actas. Ambas
son cuestiones que “se suman” a las de los descuadres en
amortización y sobre las que el PSOE está también
“trabajando”, apuntó el socialista.
Todo ello tiene que aclararlo un Gobierno, insistió, que a
su modo de ver está “contribuyendo a la incertidumbre y por
lo tanto a la generación de suspicacias y sospechas, a que
los ciudadanos cada vez más, empiecen a pensar que algo muy
podrido, y no era la basura, había en la relación del
Gobierno con Urbaser”. Esto es algo que provoca el Gobierno,
aseguró Carracao, “con su silencio y a trompicones una vez
que nosotros le estamos obligando a pronunciarse y no
tomando una actitud activa de decidir sacar todo lo que haya
en estos informes”.
“Todo esto tiene que aclararlo el presidente -insistió- no
vale con decir vuelven con las carracadas, esto es una
cuestión personal..., no vale nada de lo que están diciendo,
lo único que vale es que realmente tengan la voluntad de dar
la cara ante los ciudadanos y de depurar las
responsabilidades que haya que depurar”.
En la misma línea, Carracao señaló que cuando se encarga una
consultoría “es para que nos digan si se hace bien o no”. El
socialista leyó el párrafo dedicado al gasto financiero del
inmovilizado, que se calculó “con el resultado de aplicar el
valor neto contable con el tipo de interés fijado por
Urbaser S.A.”. “Es decir, es la propia empresa la que pone
el tipo de interés, que en 2003 fue del 5,34%, y el
consultor añade que se trataba de un interés legal del
dinero incrementado en un 1,1%”, explicó. “Alguien podría no
haberse dado cuenta en el contrato, pero si la consultoría
me lo está diciendo en la página 10, que no está oculto,
alguien del Gobierno debería haberlo visto y haberle dicho a
la empresa que no íbamos a pagar más de lo que parece que
podría ser razonable”, concluyó el socialista, para
preguntarse “por qué y cómo es posible” esto y afirmar que
es su “obligación de oposición” insistir en estos asuntos,
porque si no sería “cómplice de lo que arrojan los datos,
sea lo que sea que arrojen”.
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