Si el apagón de luz que se produjo minutos después del
alumbrado del recinto ferial fue sufrido por todos los
ceutíes, todavía peor lo tuvieron los quince voluntarios de
Cruz Roja en Ceuta durante la primera jornada de las Fiestas
Patronales.
En la franja horaria comprendida entre las diez de la noche
y las siete de la madrugada, la entidad humanitaria realizó
un total de 48 intervenciones médicas de las cuales seis
tuvieron que ser trasladadas al hospital del INGESA. La
primera, y nada más entrar la furgoneta de la institución en
la feria, fue la asistencia a un aborto y con posterioridad,
tres intoxicaciones etílicas de las cuales dos se produjeron
en menores.
Durante las más de ocho horas de atención a la ciudadanía,
los voluntarios también trataron una lesión de rodilla, dos
desvanecimientos, tres contusiones, tres mareos originados
en las atracciones, 21 heridas, tres esguinces, dos
limpiezas oculares, dolencias, una quemadura e incluso
subidas de azúcar. En su mayoría, las heridas fueron
provocadas por cristales en los pies y que atraviesan el
calzado y alguna que otra riña sin especificar.
Por otro lado, desde Cruz Roja han querido recordar el
servicio que se presta a través de las pulseras de
localización para menores, aunque en esta primera jornada no
se colocó ninguna. Este sistema, totalmente gratuito,
permite que el menor lleve consigo un teléfono de
localización para que cualquier persona que encuentre al
niño se ponga en contacto con sus familiares.
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