El Pleno ratificó ayer, con los votos a favor de PP, UDCE-IU
y PSOE, que el 17 de noviembre del año próximo, jornada en
la que se espera que coincida la Pascua musulmana del
sacrificio, será festivo laboral en la ciudad por primera
vez. Ello será posible trasladando a esa fecha el festivo
laboral de la festividad de la Asunción de la Virgen, el 15
de agosto, que en 2010 caerá en domingo, en lugar de al
lunes posterior. El resto de los festivos nacionales y
locales seguirán celebrándose como viene siendo costumbre.
La única nota polémica del debate la puso el consejero de
Presidencia al destacar el “civismo” de la celebración del
final de Ramadán “este año”, precisión que molestó a UDCE-IU.
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