La AD Ceuta se jugaba ayer algo más que tres puntos ante el
Mérida. Sería una exageración hablar de partido clave en la
12ª jornada, pero los caballas habían sumado un punto ante
el Melilla, Cartagena y Águilas y no podían permitirse un
tropiezo en casa. Perder con el mejor equipo del grupo a
domicilio hubiera alejado a los blancos de la zona de
ascenso, además de alargar la racha negativa.
Los ceutíes tuvieron la suerte de cara porque a los dos
minutos un regalo de Juli Ferrer no lo desaprovechó Enzo. El
Mérida se rehizo y empató por medio del argentino Luciano,
un buen delantero, pero este Ceuta tiene muchos recursos en
ataque y también marca a balón parado. Pepe Martínez batió a
Orlando de falta directa. En el segundo tiempo Enzo y Sandro
dejaron el partido visto para sentencia, pero el equipo de
Diego Quintero levantó el pie del acelerador, volvió a
fallar un penalti (van tres seguidos), el Mérida de Fabri
nunca se entregó y le metió el miedo en el cuerpo a los
jugadores ceutíes con el segundo gol de Luciano y el tanto
de Ismael. La AD Ceuta hizo los deberes al embolsarse los
tres puntos, pero Quintero avisó que si no aprenden a
manejar los partidos el camino hacia la ansiada fase de
ascenso resultará muy complicado.
El Ceuta tiene mucha llegada y gol, pese a la sequía de las
dos últimas jornadas, pero le cuesta un mundo dejar la
portería a cero porque concede demasiado y los contrarios se
aprovechan para plantarse como Pedro por su casa ante Lledó.
Al equipo blanco le salvó ayer su facilidad realizadora (es
el más goleador en su campo), pero el día que la pelotita no
entra parece condenado a la derrota. Ganar en Alcalá de
Guadaira, el próximo reto de la AD Ceuta.
|