La Radio Televisión Pública de Ceuta (RTVCE), organismo
dependiente del Gobierno ceutí, presentó un decálogo sobre
el tratamiento periodístico de las informaciones sobre
violencia machista que ha elaborado en colaboración con la
Ciudad de Ceuta y la Delegación del Gobierno.
En primer lugar “usaremos los términos “violencia contra las
mujeres”, “violencia de género” y “violencia machista”.
Desterraremos de nuestras redacciones la figura de crimen
pasional”.
La violencia de género “es un delito y un problema social,
por ello le daremos este tratamiento. No publicaremos ni
imágenes ni declaraciones que confundan interés social con
morbo”.
En tercer lugar “es fundamental preservar la integridad,
dignidad e imagen de las víctimas. No incluiremos
información que pueda perjudicar a ella o a su entorno”.
Además los medios “identificaremos al presunto agresor de la
víctima. Señalaremos las situaciones y actitudes que ponen
en riesgo a la mujer en una relación violenta”.
Los periodistas “nunca buscaremos justificaciones o motivos
(adicción al alcohol o a cualquier tipo de sustancias
psicoactivas, dificultades económicas, desempleo, etc...)
como causa de la violencia de género. La causa es el control
y el dominio que determinados hombres ejercen contra
aquellas mujeres con las que mantienen o han mantenido una
relación afectiva”.
Otros aspectos son evitar “las opiniones de vecinos o
familiares que no hayan sido testigos directos de los
hechos. Nunca recogeremos opiniones positivas sobre el
agresor. Procuraremos que los testimonios no produzcan el
efecto de desacreditar a la víctima. No incluiremos en la
información detalles precisos y reiterados sobre el modo en
que se ejerció la violencia para evitar el posible efecto
imitación”.
Además “intentaremos reforzar las opiniones de personas
expertas en la materia, priorizaremos las fuentes policiales
y de la investigación. No se informará con precipitación”.
Otro compromiso es que “mantendremos los temas en agenda,
denunciando la violencia en todas sus expresiones:
psicológica, económica, física, sin esperar la muerte de
mujeres. Abordaremos el relato de los hechos tomando en
consideración su singularidad pero también aquello que lo
asemeja a otros casos. Eso permitirá abandonar
consideraciones tales como “otro caso de”, “un caso más”,
evitando un efecto anestesiante”.
Finalmente “incluiremos en la noticia el teléfono gratuito
de ayuda a las víctimas y cualquier información útil”.
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