Los cuidados paliativos se perciben como una asistencia que
se da “muy al final” de la vida cuando apenas quedan unos
días o semanas. Algo que para Álvaro Gándara, presidente de
la Sociedad Española de Cuidados Paliativos, es un error y
por ello esperan poder cambiar este concepto. “Nosotros lo
que queremos es precisamente lo contrario, poder atender a
los pacientes durante un periodo largo, a veces incluso de
meses”, explicó ayer a EL PUEBLO en las IV Jornadas Ceutíes
de Cuidados Paliativos.
El papel de la familia en la fase terminal es fundamental y
así lo señaló ayer Gándara. “Uno de las mayores causas de
ingreso en nuestras unidades es la claudicación familiar”,
apuntó para advertir de que es importante atender a la
familia y darles ayudas. “Los países civilizados se dan
sueldos o bajas laborales incentivadas”, trasladó. Sin
embargo, en España no existe estas ayudas en el ámbito
paliativo. El problema, aclaró el presidente de la SECPAL es
“la falta de coordinacióno entre lo sociosanitario y lo
sanitario”. “Son dos ámbitos distintos, separados en dos
consejerías, y lo lógico es ponerlos de acuerdo, pero lo que
se consigue aquí son ayudas de tareas domésticas dos horas a
la semana que no sirven para nada”, lamentó. Y es que,
Gándara recuerda que si el paciente ingresa en un hospital
el coste diario de una cama va de los 400 a los 600 euros.
Un coste que sale del presupuesto sanitario y no
sociosanitario. “Lo lógico sería decir sacamos de esta hucha
para meterlo en la otra, pero no lo hacen y es una falta de
coordinación y en el fondo de inteligencia”, criticó.
Ayuda integral
Mientras, el que pierde es el paciente. Para los que están
en fase terminal, los cuidados paliativos pueden mejorar su
calidad de vida en el aspecto físico, controlando bien el
dolor y los síntomas, y también en el ámbito psicológico,
tratando la ansiedad y la posible depresión. Además, se le
atienda también en el ámbito social para que puedan realizar
tareas como el testamento. “Eso es morirse bien, con todos
nuestros aspectos en regla y tras despedirse de la gente”,
resumió.
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