La
operación fue realizada por miembros de la Agencia
Tributaria y la Guardia Civil. La carga oficial eran
coches y el escáner desveló que en ellos había
ocultas casi un centenar de pistolas y fusiles
La
representación de la familia de la víctima ha pedido
que se invaliden varias pruebas que pide la defensa,
como la declaración del delegado del Gobierno