La comisaria europea de Interior de la Unión Europa, Cecilia
Malsmtrön, ha admitido que Italia está sufriendo “una
presión enorme” migratoria y la dificultad de cooperar con
Libia, de donde sale el 100 por cien de los barcos a Italia,
pero ha insistido en la ayuda comunitaria brindada como
demuestra que el país ha recibido “casi 500 millones” de
ayuda en los últimos años de los distintos fondos y será “el
primer recipiente de fondos” en el próximo periodo y también
han apoyado a Italia reforzando las operaciones de Frontex
en el Mediterráneo y con apoyo a su operación Mare Nostrum.
“No es justo decir que la Comisión ha abandonado a Italia”,
ha zanjado Malmström, que ha instado a los Estados miembros
a “aumentar su contribución” a Frontex. “Algunos Estados
miembro tiene que hacer más”, ha insistido, confiando en que
“será más fácilmente implicar a otros Estados miembros”
cuando tengan más claridad de las peticiones de ayuda
concretas de Italia.
Por lo que se refiere a las tendencias migratorias de este
año, Visser ha reconocido un aumento de las peticiones de
asilo del 19 por ciento en la UE en los primeros cinco meses
de 2014.
Las peticiones de asilo de sirios sigue aumentando en 2014,
también crecen las de eritreos y caen las de los ciudadanos
rusos, mientras que apenas hay cambios en las demandas de
iraquíes.
Aumento de ucranianos
Visser ha destacado el fuerte aumento de las peticiones de
asilo de ucranianos a la UE en 2014. Sólo entre marzo y mayo
la Unión Europea ha recibido más de 2.000 peticiones, frente
al centenar de peticiones al mes registradas de media en los
últimos 20 años, algo que también preocupa en Europa y que
está obligando a sus dirigentes a buscar soluciones en este
sentido
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