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Pedro Gordillo desconoce si el Gobierno de la Ciudad estaba
detrás de la grabación del vídeo que desencadenó todo el
escándalo, ya que “si supiese algo con seguridad, no cabe la
menor duda que lo haría público para que toda Ceuta lo
supiese. No puedo asegurar nada ni decir nada. Sospechas
tengo muchas, pero no puedo hablar por sospechas, sobre todo
en estos casos”.
El ex vicepresidente tiene claro que con todo este asunto ha
existido mal comportamiento, “ha habido comportamientos
absurdos y creí que una amistad era una amistad”, señalando
a algunos compañeros de formación y de la política “y hoy
puedo decir que en la política no hay amistad”, dejando
entrever con sus palabras que el comportamiento de los
compañeros no fue el adecuado.
Al hilo de esta afirmación, se siente decepcionado por
muchas personas “a las que has ayudado y las que le he dado
todo en la vida y luego, incluso, ni te saludan, porque
parece que pueda hacerle daño y eso es lo que no entiendo.
¿Qué daño podría hacer a una persona que le digo adiós?, se
preguntó.
Tras mucho insistirle y tras sus palabras reconoció que hay
muchas personas del Gobierno que no le saludan desde
entonces, pero no se mostró preocupado, aunque volvió a
enviar un aviso a navegantes, “porque igual luego salen
algunas cosas a relucir y “encima te culpan”.
Más amigos que enemigos
Haciendo un balance, Gordillo dejó claro que se siente muy
satisfecho, porque son más las personas que le aprecian que
las que lo detestan y “a lo mejor hoy algunas están en
circunstancias parecidas y eso es porque creo que Dios no
deja a nadie sin decirle ojo y cuidado”, espetó el que fuese
vicepresidente.
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Caso Gordillo
