El Gobierno de la Ciudad de Ceuta pisa a fondo el acelerador
para evitarse problemas graves tras abandonar la
reestructuración del sector público empresarial.
El proceso de reactivación de las empresas municipales es
más complejo de lo que parece y aunque desde el Ejecutivo se
repite una y otra vez que los trabajadores no van a tener
ningún tipo de problemas, existen ciertos supuestos posibles
que podrían poner en serios aprietos al Ejecutivo sobre este
respecto.
Sin duda, en el seno de Gobierno de Vivas existe
preocupación por el asunto y es por ello que se han activado
todos los mecanismos necesarios para la evitación de
situaciones complicadas, máxime cuando el Ejecutivo viene
utilizando como defensa de su gestión la no destrucción de
empleo público y la estabilidad en el mismo.
Aunque desde el Gobierno no se quiso decir la fecha exacta
de la celebración del pleno extraordinario y monográfico
sobre el asunto -Yolanda Bel, en su intervención como
portavoz accidental, no la quiso desvelar a preguntas de
este medio- está claro que la mencionada sesión tiene que
celebrarse en esta semana que entra, puesto que si no fuese
así, al Ejecutivo se le presentaría el primer problema
serio. Pondría en peligro el acuerdo alcanzado con la
Seguridad Social para el asunto de las altas del personal de
las empresas en los organismos autónomos, acuerdo que según
las informaciones obtenidas por este diario depende de que
se anulen los acuerdos para la puesta en marcha del proceso
de reestructuración llevado a cabo por parte de la Ciudad y
que provocó la disolución de las empresas, aunque no su
liquidación ni extinción.
Como ya publicó este diario, el 30 de diciembre del año
pasado entró en vigor la Ley de Racionalización y
Sostenibilidad de la Administración Local, posteriormente,
el 1 enero 2014 entran en funcionamiento los organismos
autónomos creados por la Ciudad.
Esto hace que los trabajadores de las empresas municipales
incluidas en los organismos autónomos, nombrados como
Servicios Regionales, pasasen a depender de los segundos
citados, por lo que el Ayuntamiento procedió a darles de
baja de las sociedades en las que se encontraban, ya que
éstas fueron disueltas, y darles de alta en los organismos
de nueva creación.
Si el Pleno no anula el acuerdo por el que se inició este
proceso, la Seguridad Social no retraería el acto
administrativo efectuado y, además, no podría dar de alta a
los trabajadores de nuevo en las empresas municipales.
Abono de las nóminas
Todo lo dicho tiene especial incidencia como se puede
comprender con el abono de las nóminas a los trabajadores,
que es realmente el asunto que preocupa, y mucho, al
Gobierno de Juan Vivas.
Como es lógico, si la anulación de los acuerdos de inicio
del proceso de reestructuración se produce a esta misma
semana, el Gobierno iniciaría acto seguido la reactivación
de las empresas, algo que la legislación vigente permite, y
dando de alta nuevamente a los trabajadores en las mismas.
El único problema sería en cómo cobrarían estos productores
las nóminas. ¿Sería una o dos nóminas? ¿Qué pasa con la
antigüedad de los trabajadores? Sobre esta última cuestión
hay que tener en cuenta que los empleados han sido dados de
baja de las empresas y de alta en los Servicios Regionales.
Por lo que es entendible que si existe se anula el acuerdo y
se retrotae todo por parte de la Seguridad Social el
problema podría estar resuelto
Siendo así, saltaría a la palestra el siguiente. Si los
Presupuestos sólo recogen partidas presupuestarias para los
Servicios Regionales, ¿de qué partida se abonaría esta
mensualidad que debe hacerse efectiva prácticamente ya a los
trabajadores?
Otra gran diatriba que nadie explica es la de los
Presupuestos, si se vuelve a las empresas municipales es
obvio que habrá que modificarlos y eso conlleva realizar la
propuesta, llevarla a Comisión de Gobierno, aprobarla en
pleno y someterla treinta días a exposición pública.
Las interrogantes vuelven a surgir, ¿cómo afectará todo esto
a los pagos de las nóminas de los trabajadores? ¿Qué hará el
Gobierno a la hora de tener que hacer frente a los pagos de
proveedores? ¿Afectará toda esta situación?
En ese sentido hay quién opina que una solución pasaría por
celebrar una sesión plenaria en la que anulara la aprobación
de los Presupuestos, lo que provocaría que los del año
anterior quedaran prorrogados, aunque esta hipótesis se
antoja bastante impensable.
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Gestiones a quinta marcha
El Gobierno local no cesa de
realizar gestiones en pos a volver a poner en orden lo que
quizá no se tuvo que desordenar si que, como airean a los
cuatro vientos, todo estaba en perfecto estado de revista,
por usar un símil. Los servicios jurídicos están a tope de
trabajo, los financieros igual y es que hay que tener todos
los papeles en orden no para mañana, si no para ayer, como
se suele decir. El giro de 180 grados dado por el Ejecutivo
ceutí con el asunto de la reestructuración ha venido a meter
muchas prisas dentro de la Administración y ahora todos
buscan papeles y lo que se solicite para que el presidente
no se vaya a llevar alguna sorpresa desagradable.
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