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El secretario de Política Social del Partido Socialista
(PSOE), Pablo Núñez, denuncia que se han detectado “un
numero importante de incidencias” en las residencias de
ancianos de África, Nazaret y Cruz Blanca al darse varios
casos de personas a las que están cobrándoles los
medicamentos cuando por sus ingresos deberían entrar en el
cupo de acceso gratuito a los fármacos.
“El Ingesa (Instituto Nacional de Gestión Sanitaria) está
considerando a personas beneficiarias de pensiones no
contributivas y que por lo tanto no tendrían que pagar los
medicamentos, como personas que deben hacer copago”, apunta
Núñez, quien informa de que esta situación esta generando
revuelos, ya que “entre que se reclama y no, muchos
residentes deben hacer frente a un pago extraordinario de
medicamentos que no tendrían obligación de pagar”. “El
Ingesa no les ha otorgado ninguna razón y el desembolso lo
han tenido que hacer”, lamenta el socialista.
“Ya está bien de errores que tienen como consecuencia
directa el desembolso de dinero de personas que no deben
pagar”, insta Núñez, quien agrega: “Una vez más están
incidiendo estos recortes en las personas que menos deberían
de incidir”. “Ya eran malos los recortes y lo están
empeorando más”, apostilla.
Núñez destaca que el Ingesa no ha dado respuesta aún porque
no es consciente de este problema y que esto repercute en
conflictos con las farmacias a la hora de la facturación.
Normativa
El pasado 1 de julio entró en vigor el Real Decreto-Ley
16/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes para garantizar
la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y mejorar la
calidad y seguridad de sus prestaciones, en cuyo capítulo IV
abordaba las medidas sobre la prestación farmaceútica. En
esta norma se establecía que no pagarían los medicamentos
los perceptores de pensiones no contributivas o mínimas, ni
los parados de larga duración.
Por su parte, pagan el 10% de los medicamentos, hasta un
límite máximo de ocho euros al mes, los pensionistas con
ingresos inferiores a 18.000 euros. Con los mismos ingresos,
si son trabajadores pagan el 40% del precio de los
medicamentos, sin límite de pago. En cuanto a las personas
con ingresos de entre 18.000 y 100.000 euros, los
pensionistas también pagan el 10%, pero hasta un límite de
18 euros, y los trabajadores pagan el 50%. Son aquellos
trabajadores con ingresos superiores a la obligatoriedad de
hacer la declaración de la renta.
Por último, las personas con rentas superiores a 100.000
euros, pagan el 60% de los medicamentos, hasta un límite
máximo de sesenta euros, si son pensionistas y también el
60%, pero sin límite máximo, si son trabajadores. El Ingesa
estableció que el importe excedente deberían reclamarlo al
Ministerio y al INSS y que tendrían hasta seis meses para
hacer las devoluciones.
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SANIDAD
