“Donde más reconocimiento ha tenido el proyecto del Hacho ha
sido en Alemania”. Así lo destaca uno de los arquitectos que
diseñó las torres de VPO, Juan González Mariscal, del
Estudio GMG, quien explica que el interés que estas
viviendas han despertado entre los alemanes responde a su
“mentalidad”, muy distinta de la del “sur”. “Hay que tener
en cuenta que Alemania es la cuna del ecologismo y desde el
primer momento, cuando se les dedicó un artículo en una
revista de aquel país, se destacaban aspectos que tienen que
ver con la naturaleza y el aprovechamiento que el proyecto
hace de los muros de la cantera”.
Interpretación
En opinión de González Mariscal, en Alemania sería
“impensable” algo como lo sucedido con su proyecto en Ceuta,
donde los adjudicatarios de las viviendas -de protección
oficial y con precios de entre 45.000 y 90.000 euros-, han
transformado por completo las fachadas y, según destaca,
también los interiores, creados ex profeso con funciones
como favorecer la ventilación y la iluminación naturales.
Estos espacios abiertos tenían la función de favorecer la
aireación y se crearon para que fueran “de interconexión
entre la casa y la ciudad” y, sin embargo, “la gente los ha
cerrado porque no saben interpretarlo”.
“El contexto cultural” es importante, tal como apunta el
arquitecto, quien destaca que en otros países europeos, como
puede ser Alemania, es imposible que suceda algo como lo
ocurrido en Ceuta con estas viviendas de protección oficial:
“Al ser algo pagado con dinero público, no pone nadie la
mano ahí, ni un ladrillo”, concluye.
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