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El Ingesa atendió durante 2011 un total de 1.655 partos, de
los cuales el 35% (586 alumbramientos) fueron de madres
extranjeras. También fueron foráneos más del 14% de los
ingresos hospitalarios -un total de 1.014 pacientes de los
7.060 totales que fueron ingresados- y cerca del 13% de los
pacientes atendidos en el servicio de Urgencias del Hospital
Universitario durante el año pasado, esto es, 7.337 de un
total de 56.802 usuarios.
El Ingesa atendió durante 2011 un total de 586 partos de
madres extranjeras, 293 de ellos durante los primeros seis
meses del año. Un total de 1.665 bebés nacieron en la
sanidad pública ceutí a lo largo del año pasado. Por tanto,
el 35,19% de los partos atendidos por el Instituto Nacional
de Gestión Sanitaria durante 2011 fueron de madres
extranjeras, según han informado a EL PUEBLO las fuentes
oficiales de la institución. Desde dicha entidad explican
que la mayor parte de estas asistencias son a personas
marroquíes, aunque aseguran que no existe un registro
específico que recoja la nacionalidad del paciente, ni si
este es o no comunitario.
El registro de pacientes diferenciados según el país de
procedencia es uno de los objetivos del Ingesa según
sostienen desde la institución. De hecho, es Estado recibe
de los países integrados en la Unión Europea una
compensación económica por los pacientes comunitarios que se
atienden en el Sistema Nacional de Salud.
Este porcentaje se ha incrementado con respecto a los años
anteriores. El Ingesa atendió en 2010 un total de 1677
partos, de los cuales el 32,9% fueron extranjeros, esto es,
552 alumbramientos. Un año antes el porcentaje fue del
33,35%, puesto que de los 1.508 partos atendidos en la
sanidad pública ceutí en 2010, un total de 503 fueron madres
extranjeras.
Ingresos hospitalarios
Un total de 7.060 pacientes fueron ingresados en el Hospital
Universitario de Ceuta en 2011. De estos, 1.014 personas
eran extranjeras, es decir, el 14,36% era población foránea.
En la primera mitad del año, el Ingesa llevó a cabo un total
de 570 ingresos a personas extranjeras, diez de estas
procedían del CETI (Centro de Estancia Temporal de
Inmigrantes).
En 2010 ingresaron 7.046 personas, de estas, un total de
1.067 eran extranjeros (15,14%), de los cuales, un total de
22 eran inmigrantes del CETI. Este porcentaje se situó un
año antes en un 13,29%, puesto que en 2009, de los 6.913
ingresos hospitalarios que registró el Ingesa, 919 eran de
personas extranjeras; procedentes del CETI eran 31
inmigrantes.
Urgencias
En cuanto a las Urgencias del Hospital Universitario de
Ceuta, uno de los servicios sobre el que más quejas
procedentes de pacientes, profesionales sanitarios y
representantes sindicales se reciben debido a los colapsos y
al constante flujo de usuarios, también se ha registrado un
elevado índice de atención sanitaria a población extranjera.
Un total de 56.802 personas pasaron por el servicio de
Urgencias durante el año 2011, de estas, el 12,91%, es
decir, 7.337 personas, eran extranjeras. Entre enero y junio
habían acudido a este servicio 4.384 personas foráneas, 21
de estas procedentes del CETI.
Urgencias registró el año pasado 2.102 atenciones más que el
año precedente, mientras que el incremento de pacientes de
2009 a 2010 había sido sólo de 196 personas. En cuanto a la
población extranjera, el incremento de pacientes en 2011 con
respecto a 2010 había sido de 550 pacientes más, puesto que
habían sido 6.787 los extranjeros (58 de ellos del CETI) que
acudieron a Urgencias ese año. Con respecto a 2009, el
incremento había sido de 153 pacientes, situando la cifra de
asistencia en 6.634 personas (de ellos, 94 pertenecían al
CETI). Por lo tanto, de las 54.700 personas atendidas en
Urgencias en 2010, el 12,4% fueron pacientes extranjeros. El
año anterior, de los 54.504 usuarios que pasaron por este
servicio del Ingesa, el 12,17% no tenían tarjeta sanitaria
española porque era población extranjera.
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Cruzar la frontera “para servirse” de la Sanidad epañola
El director territorial del
Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, Fernando
Pérez-Padilla, ya lo dijo durante su primera comparecencia
pública tras asumir el cargo, el pasado 27 de enero: había
que hacer una distinción entre la asistencia en casos de
urgencias y “los casos especiales”, la atención a personas
que cruzan la frontera “para servirse de la sanidad española
porque no tienen recursos económicos o porque creen que esta
es de mejor calidad”. Para este tipo de casos, Pérez-Padilla
se mostró partidario de “poner freno o coto” a esta
situación. “Mi idea es que a las personas que no son del
Ingesa se les traten, pero que luego ese tratamiento
revierta unos ingresos económicos para que se mantenga la
cadena y no sea un gravamen para los ciudadanos que pagan
sus impuestos”, explicó en esta ocasión, en la que lo
catalogó como “un asunto difícil”.
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SANIDAD
