Márquez ha explicado que ha sido “complicada” la labor de
elaborar unas cuentas en las que se han mantenido cumplidos
cuatro objetivos de base “las políticas para el desarrollo
del empleo; el mantenimiento del pulso social; resguardar de
la crisis generalizada la prestación de los servicios
públicos esenciales y que no desfallezca la inversión
pública”. Con estos cuatro pilares, se soporta unos
presupuestos que ha visto descender hasta un 25% la
inversión pública. “Algo que se debe a las dificultades
financieras”, ha dicho Márquez en referencia a la situación
de la banca actualmente. No obstante, ha dejado claro que
aquella inversión pública que se realice contará con la
financiación requerida para la ejecución de la obra que se
lleve a cabo.
Por otro lado, el plan de austeridad, las ‘tijeras’, se
meten también en las actividades lúdicas con un recorte del
12% y en las subvenciones a los clubes de categoría nacional
en un 48%.
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