El teniente coronel de la Comandancia General de Melilla
Ignacio Fuente Cobo, tituló su conferencia, la segunda de la
jornada, como ‘El Sáhara Pccidental: antecedentes, situación
actual y perspectiva de futuro’. El teniente coronel, que es
además ‘Máster en Seguridad y Defensa por la UNED’, explicó
que la presencia española en dicho territorio dejó efectos
que todavía perduran, y que el Sáhara se encuentra en una
situación de estancamiento desde el punto de vista del
desarrollo político.
Pregunta.- ¿Qué va a tratar en su conferencia?
Respuesta.- Voy a tratar la presencia de España en el Sáhara,
un periodo largo que se extiende desde 1885, que llegaron
los primeros exploradores, con un carácter un poco
aventurero, hasta 1976, que se marcharon los últimos
soldados.
P.- ¿Qué ha significado para España su presencia en el
Sáhara?
R.- Es un territorio muy próximo y los efectos de la
presencia española todavía perduran. La visión que tiene la
gente es que las cosas no se hicieron bien con la presencia
española, que era un periodo que tenía que haber terminado
de una manera natural, al igual que en otros países de
África, con un proceso de descolonización, bajo el amparo de
la carta de Naciones Unidas, y a través de un referendum de
determinación donde la población hubiese decidido cuál era
su voluntad, al igual que había pasado con las colonias
francesas e inglesa, e igual que pasaría con las colonias
portguesas. En España no pasó esto y dejó una percepción
sobre la opinión pública, y sobre la conciencia nacional muy
intensa, que se ha visto acrecentada con hechos muy
específicos como son, por ejemplo, la presencia de niños
todos los años repartidos por todo el territorio, y la
presencia de asociaciones favorables a la tésis saharauis en
todas las provincias españolas.
Pregunta.- ¿En qué momento se encuentra ahora este
territorio?
R.- Se encuentra ahora en un momento de estancamiento desde
el punto de vista del desarrollo político, porque todas las
iniciativas que han realizado han fracasado, desde la
iniciativa de descolonización pura de Naciones Unidas
durante el periodo español, que terminó en reparto, desde la
iniciativa militar mediante una guerra abierta en el
desierto, que duró trece años y que terminó con una tregua
inestable en el 88, o las posteriores iniciativas
auspiciadas por Estados Unidos, que pretendían unos procesos
de autodeterminación contentando a todo el mundo, lo cual
era imposible. Desde el punto de vista militar, la espada
está en alto.
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