La ministra de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire
Pajín, llegó al hospital Universitario donde la recibió la
comitiva del Ingesa. Tras recorrer las instalaciones del
centro, ofreció un discurso y entregó la Cruz de Sanidad a
una matrona ya jubilada. Antes de desplazarse al centro para
presentar el proyecto de una residencia de ancianos, destapó
una placa en el centro de Loma Colmenar en reconocimiento de
los profesionales.
“Es en las ciudades autónomas donde nuestra obligación de
cohesión territorial cobra más sentido -puntualizó la
titular de Sanidad, Política Social e Igualdad, Leire Pajín,
Para la ministra, “las especiales características de este
territorio no pueden ser, en ningún caso, una excusa para
que los ciudadanos no vean garantizado su acceso a la
sanidad publica de calidad. En una España diversa y
democrática no puede haber ciudadanos de segunda con un
diferente acceso según donde vivan”. Con estas palabras se
dirigió la ministra de Sanidad a los ceutíes durante su
visita ayer a nuestra ciudad.
Llegó a Ceuta en helicóptero a las 11.45 horas. Tal y como
estaba previsto, la recibió el delegado del Gobierno, José
Fernández Chacón, para refugiarla bajo su paraguas, aunque
no pudiese impedir que a la ministra se le mojara la melena.
A las doce y cuarto, la esperaba en el Hospital
Universitario de Ceuta toda la comitiva del Ingesa
(Instituto Nacional de Gestión Sanitaria), encabezada por
sus autoridades: la directora, Sara Pupato; el director
Territorial, Jesús Lopera; y el gerente del área sanitaria,
Juan Carlos Querol.
Tras el saludo oficial a las autoridades, inició su apretada
agenda. Se estrenó con la inauguración de la muestra
fotográfica que en Ingesa ha colocado en el hall del
Universitario para conmemorar el primer aniversario del
centro desde su traslado del Hospital de la Cruz Roja.
Seguidmente, inició un recorrido por las instalaciones del
centro de Loma Colmenar, en el cual cmprobó el nuevo
material del “centro más innovador de todo el país”, y alabó
a una trabajadora que le aseguró que el Universitario “está
muchísimo mejor que el de la Cruz Roja”. Visitó algunos
servicios como el de Rayos, donde en la sala de tomografía
axial computerizada le “impresionó” ver a través del cristal
a un hombre en el TAC.
Después visitó otros servicios como el de Urgencias, pero en
dicha visita no estuvo permitido el acceso de los medios de
comunicación.
Al finalizar su recorrido, saludó a los representantes
sindicales y mantuvo una breve reunión con ellos que los
dejó encantados.
Una vez en el salón de actos, descubrió una placa “en
reconocimiento a los profesionales del Ingesa que hicieron
posible este magnífico hospital”. Después, ofreció un
discurso en el que compartió su “enorme satisfacción” por
poder participar en los actos de homenaje del primer
aniversario del centro. En cuanto al sistema de salud
nacional explicó que es el servicio público “que mayor
valoración recibe por los ciudadanos, gracias a la amplia
red de recursos que cuenta con el equipamiento más avanzado,
pero, sobretodo, al conjunto de profesionales sanitarios que
disponen de una capacitación de primer nivel”. A ellos quiso
transmitir su “más profundo respeto y reconocimiento”, y
añadió: “La profesionalidad, el rigor y la dedicación son
claves para una atención de calidad que yo llamaría escala
humana”.
A nivel local, recordó que en Ceuta se han invertido 120
millones. “La sanidad es el recurso que todos utilizamos en
nuestra vida”, explicó. “Y seguiremos trabajando”, añadió.
En ese sentido, adelantó nuevos proyectos, como la
ampliación del centro de salud del Tarajal, cuyas obras se
iniciarán este verano, y en las que aseguró que se van a
invertir cinco millones de euros. “Será una reforma integral
en el edificio que ya existe y una importante ampliación que
permita duplicar el número de consultas”, concretó.
Por último se refirió a que ha habido “un aumento de
plantilla del 26% en los últimos cinco años” y aseguró
“mejoras de eficiencia y gasto que buscan una calidad de un
sistema construido entre todos”. Antes de finalizar sus
actos en el centro, impuso la Cruz de Sanidad a la matrona
Francisca Ramírez Molina.
El Ingesa ofreció un aperitivo, pero la ministra tuvo que
hacer “mutis por el foro” si quería llegar a tiempo a su
encuentro con el presidente de la ciudad, Juan Vivas, para
inaugurar el proyecto de una residencia de ancianos.
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