El nuevo Reglamento del Ingreso Mínimo de Inserción Social (IMIS)
superó ayer sin problemas el trámite de recibir el visto
bueno del Pleno, que refrendó por unanimidad las
modificaciones introducidas en siete de sus artículos. La
consejera de Asuntos Sociales, Carolina Pérez, que defendió
la propuesta; la diputada de UDCE Fatima Hamed; y la
portavoz del Grupo Socialista, Inmaculada Ramírez,
coincidieron en desear que los cambios sirvan para que el
salario social llegue a más familias (actualmente lo reciben
84, sólo 11 en su cantidad máxima de 420 euros) y, así,
cumpla al fin para el que fue creado: aliviar la situación
de quienes peor lo pasan en la ciudad autónoma.
El texto elaborado por el Gobierno recibió diez alegaciones:
las seis del PSOE fueron aceptadas, algunas con pequeñas
modificaciones, y se hizo lo propio con otras tres de UDCE.
Hamed lamentó que la Ciudad no aceptase eliminar el límite
de 60 meses establecido para su percepción, aunque Pérez le
recordó que no hay ayuda indefinida en el tiempo.
Sí se ha suprimido el periodo de seis meses de carencia que
el Reglamento aprobado en 2008 establecía para que aquellas
familias que habían recibido este subsidio durante un año
pudiesen volver a solicitarlo.
También recoge el nuevo texto, a propuesta socialista, que
sólo se suspenderá el pago del IMIS durante 6 meses y no un
año cuando los perceptores accedan a otra prestación social.
Igualmente el valor del patrimonio se vincula ahora a otros
indicadores como el IPREM y se prorrateará en función del
número de miembros de cada unidad de convivencia y de estas
dentro de una unidad familiar.
Hamed y Ramírez coincidieron en advertir a la consejera de
que si los cambios consensuados no surten el efecto
pretendido volverán a someter el asunto a debate para
introducir nuevas modificaciones.
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