A pesar de que las empresas del sector privado han sido las
que más han secundado la huelga en Ceuta -con sectores como
el de la construcción en un 100% de participación-ayer se
produjeron pequeños incidentes en ‘Eroski’ cuando un piquete
informativo entró en las instalaciones del centro comercial
Parques de Ceuta para “informar” a los trabajadores acerca
de la huelga y la reforma laboral.
El piquete informativo que acudió a ‘Eroski’ durante el día
de la huelga de ayer provocó algún que otro incidente con
los representantes de la empresa cuando UGT y CCOO trataban
de informar a los trabajadores de la misma. Representantes
de ambos sindicatos, valoraron “de forma positiva” el
transcurso de toda la jornada. “Simplemente se quiere
informar a los trabajadores. Nunca se dice nada de que los
empresarios coaccionan a los empleados”, asegura Emilio
Postigo de CCOO. Por su parte, el secretario de acción
sindical de UGT, Eloy Verdugo, también es de la opinión de
que “por desgracia” se ha coaccionado a algunos trabajadores
para que no secundaran la huelga: “Este piquete es una
manera de presionar porque siempre se le busca la vuelta
para que no participen en la movilización”.
“Se han llevado a cabo un buen número de asambleas. Estamos
contentos, se ha informado desde las empresas grandes a las
pequeñas. Además, los comercios pequeños saben de la
gravedad de la reforma y han cerrado”, continúa el
representante de CCOO.
Así, los datos del sindicato han sido contundentes en la
participación de todo el sector privado en general: un 100%
en la construcción y en hostelería y comercio, un 70%. Desde
UGT se dieron cifras algo menores en este sentido, con “un
50% en hostelería y un 60% en los comercios”.
En definitiva, el objetivo de los sindicatos tras la
celebración de la huelga será “que el Gobierno rectifique y
que dé marcha atrás con esta reforma”. Y es que las
organizaciones sindicales “están dispuestas a negociar
siempre y cuando se rectifique”, continúa Verdugo. Para
Postigo lo que sería necesaria “una solución intermedia
entre el trabajador y el empresario, sentarse a negociar en
serio, no lo que ha ocurrido, puesto que el empresario ya
sabía lo que pasaba, que el Gobierno decretaba una reforma
laboral. Los empleados no son máquinas de trabajar. Hay que
sentarse para buscar soluciones, tanto para los parados como
para los trabajadores”.
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