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Las mujeres que no son de la provincia de Tetuán buscan
diferentes opciones para entrar en Ceuta, desde empadronarse
en casa de un familiar que reside en la ciudad hasta pagar
para que les hagan un pasaporte con domicilio en tierras
ceutíes. Según el estudio elaborado por varios organismos
locales, el precio oscila entre los 300 y los 500 euros
aunque algunas marroquíes han confesado haber pagado 1.000
euros para obtener el pasaporte. Además, se han dado casos
de mujeres que han entrado en la ciudad sin ningún tipo de
documentación, aprovechando los momentos de mayor tránsito
en la frontera y camuflándose entre las mujeres porteadoras.
“Entré como disfrazada de la gente que coge mercancía y
entonces me quedé aquí por lo menos 2 años, luego ya salía a
ver a mis hijos y me arreglé el pasaporte en Tetuán”,
reconoció una mujer. En cualquier caso esta fórmula de
entrada es arriesgada y no permite la movilidad posterior
hacia Marruecos.
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género,
migración y trabajo
