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El convenio de compra-venta de cuarteles que se encuentra
más avanzado, el del Brull, se cerrará en el plazo
aproximado de una semana, una vez que el texto ha sido ya
aprobado tanto por la Gerencia de Infraestructuras de
Defensa, con la que se firmará, como por parte de la Ciudad,
en este caso, durante el Consejo de Gobierno celebrado esta
misma semana.
Tal como explicó ayer a El Pueblo el consejero de Hacienda,
Francisco Márquez, el texto definitivo del acuerdo establece
la transmisión efectiva de toda la edificabilidad del Brull,
cifrada en 16.000 metros cuadrados. Los terrenos se han
valorado en 10.037.000 euros, cantidad que tal como subraya
Márquez, obra ya en poder de la Ciudad a través de la
operación crediticia firmada con Caja Madrid a finales del
pasado mes de diciembre. Tal como se contempla en el
convenio, el 25% del dinero se abonará en el momento de su
firma, mientras que el resto se aplaza para llevarlo a cabo
en tres pagos iguales.
De forma paralela al plan financiero elaborado por el máximo
responsable de Hacienda, departamento que lidera el conjunto
de la operación con Defensa, la Consejería de Fomento
desarrolla el instrumento de planeamiento urbanístico que
posibilitará la urbanización de los terrenos desafectados.
Según indicó Márquez, se calcula que las parcelas a las que
dará lugar el nuevo planeamiento, 3 o 4 que deberán
segregarse, podrán acoger hasta 450 viviendas protegidas.
Esta reordenación posbilitará la enajenación de las parcelas
a promotores privados que construirán las viviendas
protegidas de modo que la Ciudad recupere la inversión. La
intención del Ejecutivo es que la Asamblea conozca el
proyecto de urbanización antes del verano.
De este modo, la Ciudad prevé recuperar todo lo invertido y
con ello no sólo “dinamizar” la economía ceutí a través de
las inversiones en el sector de la construcción, si no
también, y según apunta el responsable de Hacienda, lograr
“un beneficio social al poner viviendas a disposición de los
ciudadanos que más lo necesitan”.
“Desde el Gobierno de la Ciudad hemos hecho los deberes y a
tiempo”, explicó Márquez, quien recordó que en uno de los
últimos plenos de la Asamblea de 2009 se aprobó la
posibilidad de recurrir al préstamo bancario para la compra
de este primer cuartel.
Esta iniciativa es, en palabras del consejero, “el primer
elemento tangible” del giro estratégico dado por el
ejecutivo ceutí a la política de vivienda mediante la
“reactivación” de las negociaciones con el Ministerio de
Defensa y supone también la primera “materialización” de los
objetivos recientemente anunciados por Vivas para 2010.
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