El presidente de la Unión de Comunidades Islámicas en
España, Riay Tatary, ha pedido a los empresarios que a
partir de hoy permitan a sus empleados musulmanes finalizar
la jornada laboral una hora antes de la puesta del sol, para
que puedan romper el ayuno con motivo del ramadán.
Tatary declaró a Servimedia que es importante que los
empresarios “ayuden” en estas fechas a sus empleados
musulmanes “máxime cuando se trata de un imperativo legal
contemplado en el acuerdo de cooperación de 1992 entre el
Gobierno y la Comisión Islámica, para que tanto trabajadores
como patronos puedan terminar la jornada laboral una hora
antes de la puesta de sol”.
El presidente de la Unión de Comunidades Islámicas subrayó
que “el buen trato de los empresarios a estos trabajadores a
efectos de facilitarle la llegada y salida aumenta la
productividad, como ha ocurrido en muchas empresas en
Europa”.
Tatary explicó que el ramadán “es un mes de renovación
espiritual, con una gran dimensión social porque se celebra
a través de la familia, que se reúne después de la puesta
del sol durante los días a romper el ayuno”. Poteriormente,
se van a las mezquitas a cumplir con la oración propia de
este mes. “Esto crea un carácter festivo espiritual, en el
sentido de convivencia y renovación de los valores islámicos
a nivel individual y colectivo”.
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