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Tras la detención de los cuatro acusados, la Unidad de
Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) procedió al registro del
domicilio que había vigilado durante 72 horas, situado en la
calle Molino.
Durante su intervención, los agentes decomisaron 40 kilos de
hachís y varios utensilios dedicados a la preparación y
venta de drogas, tales como máquinas envasadoras o pesos.
Con respecto a este domicilio, se presentaron durante la
vista oral varios interrogantes en cuanto al alquiler de la
vivienda, datos del contrato o personas que residieron o
residen en él.
Uno de los imputados argumentó que “vivo allí, no tengo
contrato firmado y puse los datos de otro de los acusados
utilizando su identidad para inscribirme en el registro de
una web donde estaba el piso para alquilar”. A lo que este
otro acusado respondió que “no sabía que hubiese una
vivienda a mi nombre, nunca he estado allí e incluso
desconozco la calle o zona”. Con respecto a estas
declaraciones, el agente instructor del operativo de
vigilancia mencionó que “es cierto que el piso está inscrito
en una página web con la identidad de uno de los acusados
pero el que vive allí o hemos visto entrar y salir con la
mercancía es otro”.
Los propietarios de dicha vivienda, en sus declaraciones
realizadas ante el Juzgado de Instrucción, confesaron
reconocer a ambos imputados; “uno de ellos realizaba los
pagos y lo hemos visto entrar y salir del domicilio. Y con
el otro no llegamos a quedar para la firma del contrato pero
es con su nombre con el que está alquilada la casa”.
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