El presidente de la Ciudad valora positivamente las
relaciones institucionales que mantiene el Gobierno de la
Ciudad Autónoma de Ceuta con la Administración General del
Estado y con todos sus representantes. Y así lo ha
recordado, una vez más, “las que mantengo con la Delegación
del Gobierno y con la Administración General del Estado
están basadas en la lealtad institucional, la colaboración
recíproca y también, por qué no decirlo, de cordialidad que
viene acompañada también de una elevada dosis también
recíproca de sinceridad y de autenticidad”, ha reconocido.
Además, Vivas ha defendido que esta cuestión debe ser con
independencia del color político que dirija los destinos de
las administraciones. “Creo que eso debe ser así porque es
un valor activo en cualquier ámbito y en el caso de Ceuta
debe ser una obligación porque estamos al servicio de la
administración pública y al servicio de los ciudadanos en
las dos administraciones con independencia de cuál sea el
sentir político o la posición ideológica de los ciudadanos.
Nosotros servimos desde ambas administraciones a todos los
ciudadanos, por lo tanto tenemos la obligación ética de
actuar en esa colaboración”, ha dicho el presidente de Ceuta
quien en la jornada de ayer fue blanco de las críticas del
nuevo secretario general del PSOE ceutí después de que el
jefe del Ejecutivo ceutí recordara que Zapatero debía
recibir “también” a los presidentes de Ceuta y de Melilla en
el ámbito de los encuentros que se mantenían con los máximos
representantes de los gobiernos autónomos desde finales del
pasado mes de diciembre. Vivas realizó esas declaraciones
tras un encuentro con Imbroda y después de que Moncloa
notificara que con Baleares acababan los encuentros de
Zapatero con las autonomías, según manifestaron fuentes del
PP.
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