Tras las declaraciones de los últimos testigos, llegó el
turno de las conclusiones por parte de la fiscalía, la
acusación particular y la defensa. Nada más iniciar su
intervención, en la que dejó constancia del elevado número
de pruebas que presentaba este caso en particular, el fiscal
José Luis Puerta abandonó la sala de la Audiencia
Provincial.
“En pocos juicios existen tal número de pruebas para acusar
a alguien y determinar su culpabilidad como ocurre en este
caso”, advirtió el fiscal José Luis Puerta iniciando las
conclusiones.
Con propiedad, el fiscal defendió la incapacidad de defensa
de la pequeña Suhaila ante el agresor; un delito juzgado
como asesinato dado que todas las pruebas han confirmado que
la niña, indefensa, estaba de espaldas y el acusado
aprovechó la coyuntura para taparle la boca y quitarle la
vida sin piedad. Pero antes de continuar con la defensa del
Ministerio Fiscal, José Luis Puerta tuvo que ausentarse de
la sala, “ya que todos somos humanos y las emociones nos
pueden”, explicó la fiscal que sustituyó la presencia de
Puerta. Aunque la humanidad del fiscal quedó patente en el
escrito de conclusiones que dejó a la fiscal y al que El
Pueblo tuvo acceso. “Si es cobarde que atacara a una mujer,
más cobarde aun es hacerlo a una menor de siete años, y más
cobarde es atacarla por la espalda, y armado, y sin que la
niña tenga nada para poder defenderse y que no puede escapar
del domicilio por tener las puertas cerradas. Y que ayer se
negase a declarar y sobretodo, es cobarde el que el acusado
no haya levantado la cara en todo el juicio”. Emotivas
palabras recitadas por la fiscal que conmocionaron a todos
los presentes.
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