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¿De dónde procederán los hidrocarburos de San Amaro?, ¿Será
el ‘Tamgout’ el responsable?,¿Qué ocurrirá si las sustancias
contaminantes llegasen por otras vías?. Todos estos
interrogantes serán hoy resueltos tras casi una semana de
incertidumbre para los ciudadanos ceutíes, en cuanto se
comuniquen los resultados de la investigación realizada por
Capitanía Marítima. Además, desde Obimasa, también se están
estudiando y analizando las características del fuel
desprendido en el litoral de San Amaro. ¿A qué grado de
contaminación han sido expuestos los aledaños de dicha zona?
Una jornada que promete ser tranquilizadora para muchos y
perjudicial para otros.
A expensas de los resultados de la investigación, los
armadores del ‘Tamgout’ se preparan para el golpe final.
El consignatario de la embarcación en Ceuta explicó ayer que
los tripulantes y el capitán del buque argelino se
encuentran muy tranquilos ante los rumores que los hacían
responsables de la derrama de hidrocarburo. Sin embargo,
ante su posible inocencia, que podría conocerse durante la
jornada de hoy, se emprenderá un proceso judicial por parte
del bufete de abogados ya que se han lanzado acusaciones que
incriminan de forma abierta al buque argelino sin que aún no
se hubieran facilitado los resultados de las
investigaciones.
Debemos recordar que parte de las tetimonios injustificados
derivan de los problemas que presentaba la embarcación
cuando llegó a Ceuta. “La historia llega el 28 de agosto
cuando el barco entró en la ciudad autónoma y presentaba 10
deficiencias técnicas, cinco muy graves. Las principales,
una vía de agua en la sala de máquinas y un sistema de
lubricación contaminado por agua salada. Se le abrió un
expediente sancionador y una multa de 120.000 euros. Y como
medida cautelar, se les aplicó otra fianza de 120.000 euros
por si se diera el caso que la derrama hubiera sido
provocada por el buque para financiar las tareas de
limpieza. Si se prueba su inocencia, se les devolverá esta
cantidad”, advirtió Francisco Sierra, responsable accidental
de Capitanía Marítima. La claridad expositiva de Sierra,
hace pocos días, vino acompañada del enfado de los armadores
del ‘Tamgout’, “porque los están culpando y fusilando por
unas circunstancias que ni los investigadores ven claras
hasta que no concluyan los análisis”. Para obtener el
resultado sobre la inocencia o no, del buque, se han tomado
muestras de la orilla de la playa, del barco y del mar. Si
coinciden, la culpabilidad total sería del ‘Tamgout’, aunque
existen otras premisas que manifiestan que las manchas hayan
podido llegar desde el Estrecho como resultado de las mareas
y los vientos que han soplado en las últimas semanas. La
tripulación espera ansiosa los resultados de estas muestras
porque además, debía llegar a Algeciras y descargar unas
mercancías que, por el momento, se encuentran en la
embarcación ya que el buque ha permanecido retenido estos
días en Ceuta. No sólo por los resultados que den las
muestras, sino por no haberse resuelto las deficiencias
técnicas que presentaba.
Desde otra perspectiva, los profesionales y biólogos de
Obimasa también han estudiado estos residuos que han
amenazado al litoral de San Amaro. Aunque aun no se ha
realizado un balance sobre el impacto mediambiental de la
zona ya que no se ha esclarecido totalmente la pureza y las
características de las sustancias.
¿De dónde procederán los hidrocarburos de San Amaro?, ¿Será
el ‘Tamgout’ el responsable?, ¿Qué ocurrirá si las
sustancias contaminantes llegasen por otras vías?. Todos
estos interrogantes y las consecuencias que de ellos se
deriven se darán a conocer durante la jornada de hoy. Un día
bastante ajetreado con incógnitas por resolver.
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La historia, paso a paso, por Francisco Sierra, responsable
accidental de Capitanía Marítima
“La historia llega el 28 de agosto
cuando el buque argelino llega con una vía de agua en la
sala de máquinas y el sistema de lubricación contaminado de
agua salada. Sobre las siete de la tarde vamos a bordo y
tratamos de resolver la emergencia que se alarga hasta el
día siguiente y con un equipo de submarinistas tapamos el
boquete. El día 2 de agosto, se inicia la contaminación
submarina y volvemos a la embarcación tratando de comprobar
la conexión. Tomamos una serie de muestras para analizar los
vertidos y en la playa también. Pero no conseguimos, a
priori, conectar una situación con la otra y se llevaron las
muestras al laboratorio”, explicó, hace pocos días,
Francisco Sierra, responsable accidental de Capitanía
Marítima. Así comenzaba la batalla de las manchas de fuel
que han ensuciado el litoral y los aledaños de San Amaro
llegando incluso a la propia orilla de la playa. Una
circunstancia similar al chapapote gallego que gracias al
plan de contención no llegó a mayores, ni se podría
catalogar como catástrofe medioambiental.
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MEDIO AMBIENTE
