El superintendente jefe de la Policía Local analizó la
primera parte de la feria, donde lo único reseñable ha sido
la detención de un grupo de individuos que vendían las
fichas para arrancar los coches de choque a la mitad del
precio de la atracción. Además, se han registrado al menos
tres peleas de jóvenes al final de la madrugada y en la zona
de las casetas; y también se han intervenido pequeñas
cantidades de droga.
El superintendente jefe de la Policía Local, Ángel Gómez,
subrayó su agradecimiento al pueblo de Ceuta por el
“excelente comportamiento que están demostrando durante esta
feria”, al menos en líneas generales, ya que resulta muy
difícil navegar en una balsa de aceite cuando durante los
nueve días que duran las fiestas patronales son más de
150.000 personas las que pasan por el recinto ferial.
La incidencia más destacada de estas primeras jornadas fue
el tráfico de fichas falsas para montarse en la atracción de
los coches de choque. Un grupo de individuos vendió durante
las noches de domingo y lunes una gran cantidad de fichas a
la mitad de precio de lo que costaban en taquillas, es
decir, que los beneficiarios de esta ganga se subían en los
coches por un euro y medio en vez de por tres. Rebajas en
plena feria; económica sumergida con los inocentes coches de
choque. Todo un plan.
La Policía aún no ha contabilizado cuál ha sido la cantidad
de dinero que han recaudado estos falsificadores, aunque la
anécdota se ha quedado en curiosidad más que en un negocio
eficaz.
Precisamente la zona de los ‘cacharritos’ está siendo la más
vigilada por la Policía. “Sabemos que ahí se concentra un
gran número de jóvenes, con unas edades muy específicas y
siempre es bueno tenerlos vigilados de cerca por si se
produjera alguna incidencia”, comentó Gómez.
Otros pequeños delitos que se han cometido durante estos
días y que se atienen al guión previsto son los hurtos,
orinar en la vía pública (con multas que alcanzan la cifra
de 60 euros) o la tenencia y consumo de drogas. Aparte de
esto, la UIR ha tenido que intervenir en varias peleas que
se han producido al final de la madrugada y en la calle de
las casetas de noche.
Cerca de las 5.56 horas de la madrugada del lunes al martes,
se produjo la pelea más virulenta de las registradas hasta
ahora. La UIR acudió en seguida al lugar de la reyerta, pero
no fue lo suficientemente rápida como para impedir que una
de las dos personas que discutían le propinara un puñetazo a
otro en la cara. En ese momento los agentes fueron a
separar, pero uno de los dos mostró una actitud más agresiva
de lo habitual, llegando a insultar y agredir a uno de los
agentes, por lo que la Policía tuvo que detenerlo. En ese
instante, un allegado de esa persona se avalanzó sobre el
agente y tuvo que ser reducido igualmente.
En cuanto a los robos, el más significativo se produjo
pasadas las 5.00 de la madrugada de este mismo día. Un chico
denunció a los agentes el robo del que fue víctima. Este
joven describió al delincuente y los policías dieron con él
en apenas unos minutos, ya que el infractor se encontraba
aún en el recinto ferial. K.B., natural de Marruecos, fue
identificado con el movil de la víctima y fue trasladado a
Comisaria.
Fuera de la feria, el pasado lunes se produjo un hecho
curioso. La Policía, en un control de tráfico, órdeno
detener el ciclomotor a R.B. en la plaza de la Constitución,
ya que circulaba sin casco. En ese mismo momento, según
informaron los agentes, la radio retransmitió el robo de un
ciclomotor que, casualmente, coincidía con la matrícula de
esta moto. R.B. es natural de Marruecos.
Un total de 34 efectivos de la Local, pertenecientes a la
Unidad de Intervención Rápida (UIR), velan por la seguridad
ciudadana dentro del recinto ferial; y 26 agentes cuidan el
tráfico, tanto las zonas de salida por Poblado Marinero,
como por Alfau; además de custodiar las zonas de
estacionamiento de autobuses y taxis. La plantilla de la UIR
está al completa y el número de efectivos es siempre el
mismo.
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