La Sirena de Punta Almina se utilizó para avisar a los
barcos en días de densa niebla como estación que emitía una
peculiar señal sonora. La edificación actualmente se
encuentra abandonada y la Delegación del Gobierno mediante
el Plan Director de Bienes de Interés Cultural del Plan de
Empleo tiene la intención de rehabilitar su entorno, el
propio edificio y dotarlo de un nuevo uso. El empleo que se
hará de La Sirena será polifuncional, en el catálogo de
opciones se maneja crear un centro de interpretación de la
naturaleza y una estación meteorológica. Se ha adecuado
además el entorno de senderos de Punta Almina.
La recuperación del viejo edificio de La Sirena se enmarca
en el Plan Director de Bienes de Interés Cultural de
Delegación del Gobierno en colaboración con el Centro de
Historia y Cultura Militar y bajo la coordinación de la
Unidad de Promoción y Desarrollo (UPD).
Este plan se ha realizado en dos fases en las que se ha
obtenido fondos fotográficos del patrimonio ceutí, se ha
realizado planimetrías y toda una recopilación y
catalagoción de datos históricos y de bibliografía
relacionada con los inmuebles. Además se ha evaluado el
estado de conservación de los edificios estudiados. El
análisis que se ha hecho de La Sirena de Punta Almina ha
concluído que no se encuentra en el mejor estado de
conservación.
Este análisis previo servirá para concluir cuáles deben ser
las medidas a adoptar para rehabilitar las edificaciones
patrimoniales. Una de las posibilidades que abre Delegación
es, si las condiciones de los inmuebles no son ruinosas,
poder dotar de un nuevo uso a las antiguas instalaciones
para cumplir unos de los objetivos de este Plan Director que
es el de dar aprovechamiento socioeconómico al patrimonio
aquitectónico ceutí.
El delegado del Gobierno, José Fernández Chacón, mostró su
interés por “recuperar un edificio como el de La Sirena
porque fue un elemento notable dentro de los edificios de
señales marítimas”. Los usos que se dará en un futuro a la
Sirena están todavía por determinar, aunque ya se barajan
varias opciones que se quieren entroncar en el Plan de
Ordenación y Usos de los Faros.
Ahora mismo la delegación de Fomento se encuentra redactando
el catalogo de usos posibles para el edificio. Un primer
ámbito estaría dirigido a la promoción cultural. Se baraja
la posibilidad de convertir el edificio en un centro de
interpretación de la naturaleza aprovechando su excepcional
ubicación y posiblemente en un observatorio de aves al
encontrarse en la Zona de Especial Protección Protección
para las Aves (ZEPA) determinada en los acantilados del
monte Hacho. También podría estar dotado de una aulas de
información dirigidas a la docencia.
El segundo ámbito de actuación sería el logístico. La Sirena
podría albergar la estación meteorológica de la Agencia
Estatal para el estudio de las condiciones atmosféricas.
El tercer ámbito de actuación sería aprovechar el entorno
paisajístico privilegiado de la edificación. En el católogo
de futuros usos se quiere tener en cuenta el dotar a la zona
de accesibilidad para que los ciudadanos puedan disfrutar
del las magníficas vistas de La Sirena. Las actuaciones ya
realizadas para la adecuación de esa parcela del monte Hacho
con la mejora de los caminos, están destinadas a crear una
red de senderos transitables entre diferentes puntos de
interés patrimonial. Todos estos proyectos no son
excluyentes, La Sirena probablemente sea un espacio
polifuncional donde se desarrollen diferentes labores.
La asociación Forja XXI, que se encuentra inmersa en el
proyecto de rehabilitación del fortín del Príncipe Felipe,
colaborará en la redacción de los futuros usos de La Sirena.
El próximo lunes se hará un primer examen del edificio.
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