Benigno Sánchez, que empezó elogiando el gran comportamiento
de la afición del Ceuta (“ha demostrado que es de superior
categoría”, declaró el lorquino), explicó que “en el primer
tiempo llegamos algo más y en el segundo creo que también el
dominio y el control fue nuestro, aunque el Girona también
tuvo buena parte del control del juego y demostró que es un
gran equipo. Con la expulsión de Sandro tuvimos que hacernos
cautelosos, porque un gol en contra nos hubiera hecho
muchísimo daño para el partido de vuelta”.
El entrenador del Ceuta dejó bien claro que “nos queda una
final en campo contrario en la que nos jugamos el ascenso de
categoría”. Benigno añadió que “ellos tienen la ventaja de
jugar en casa, pero cualquier empate a goles nos sirve para
eliminar al Girona”.
Del trabajo de sus jugadores no tenía quejas. “Estoy
orgulloso del esfuerzo, del sacrificio y del pundonor de mis
jugadores en el campo ante un buen equipo como el Girona. Mi
mensaje es de total optimismo y confianza. Yo siempre
apuesto por mi equipo y por mis jugadores y estamos
capacitados para ganar en Montilivi”, recalcó.
De la expulsión de Sandro, comentó que “existen dos
condicionantes: uno la intencionalidad porque él dice que
escucha un silbato y otro si era el último defensa; yo no lo
sé... A partir de ahí mi opinión sobre los árbitros siempre
ha sido la misma. Este árbitro es de Sevilla, nos ha
expulsado a un jugador y no le ha metido ningún gol al
Girona. Más vale no hacer comentarios porque luego te pueden
dejar mal”, añadió.
El preparador de la A.D. Ceuta incidió en que “nos queda un
partido en campo contrario y trabajaremos al máximo para
obtener un buen resultado”.
Cuestionado si el Ceuta juega mejor lejos del Murube,
respondió que “creo que hoy no hemos jugado mal, quizás en
algunos momentos lo hicimos más con el corazón que la
cabeza, pero a este equipo no se le puede decir más. Mis
jugadores han corrido, luchado y han sudado la camiseta. Al
Ceuta no se le puede pedir más de lo que está haciendo sobre
el terreno de juego”.
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