Cuando la Feria concluye comienza una aventura por la
supervivencia. Es justo en ese momento cuando cientos de
jóvenes procedentes de otros países, en su mayoría menores y
varones, comienzan una odisea para intentar conseguir una
vida mejor, arriesgándolas incluso, para lograr el sueño de
desarrollar de un futuro con más oportunidades en la
península.
El balance provisional ofrecido por la Delegación del
Gobierno mostró que el total de las detenciones realizadas
en el Recinto Ferial por la Policía Nacional y la Policía
Local a las 18:00 horas fue de 148 personas, de las que 143
fueron marroquíes y cinco (cuatro argelinos y un asiático)
pertenecientes al CETI.
Alrededor de las 23:00 horas del domingo el dispositivo
policial compuesto por efectivos de la Policía Nacional
comenzó a revisar las instalaciones del Recinto en busca de
inmigrantes indocumentados, pero, tal y como informaron los
agentes, “hasta las 4:30 horas de la madrugada todo estuvo
muy tranquilo”, incluso “ha habido atracciones que han
estado funcionando hasta pasadas las 5:00 horas”. A partir
de las 7:00 horas fue cuando comenzaron a encontrar a
indocumentados tratando de introducirse en las diferentes
atracciones y deambulando por la zona.
Algunos de ellos intentaron transformar su sueño en realidad
realizando el viaje junto a sus amigos. Tanto es así, que
cuando fueron detenidos hubo ‘camaradas’ que se entregaron
voluntariamente a la autoridad simpatizando, de esta manera,
con sus compañeros de viaje frustrados.
Asimismo, cuando los camiones que contenían las atracciones
comenzaron a realizar su salida del Recinto Ferial y se
dirigieron a las instalaciones portuarias, un numeroso grupo
de efectivos de la Policía Nacional llevó a cabo un primer
registro exhaustivo de cada uno de ellos, produciéndose
largas colas de salida. Al realizar dicho registro fue
cuando se interceptaron más indocumentados escondidos en los
camiones. Como medida de apoyo en la ejecución de esta labor
participaron 35 agentes de la IV Unidad de Intervención
Policial de Sevilla, que participa en esta Operación desde
1992.
Hoja de expulsión
Todos los indocumentados fueron llevados en primera
instancia a la caseta de la Policía Nacional. Allí los
agentes responsables tramitaron una hoja de expulsión y,
seguidamente, furgonetas de este Cuerpo de Policía les
transportaron a la frontera del Tarajal, donde fueron
introducidos en celdas, según fuentes de la Policía
Nacional.
Pero las detenciones no se llevaron a cabo solo en el
Recinto Ferial. Las escolleras del puerto de nuestra ciudad
fueron un lugar en el que muchos de ellos esperaban el
momento adecuado para tratar de saltar e introducirse en los
camiones que pasaban por allí antes de llegar al muelle de
Poniente. Baste citar como ejemplo la intervención realizada
por un agente de la Policía Local a las 11:00 horas para
detener y reducir a un joven inmigrante que saltó desde las
escolleras y se escondió en un almacén. Además, La Policía
Local encargada del control en esa zona recibió pedradas
desde las escolleras teniendo éstos que subir a las mismas
para tratar de que los jóvenes cesaran en la agresión.
Por otra parte, la Policía Local colaboró durante toda la
Operación con la Policía Nacional; primero, realizando el
control del tráfico en el Recinto Ferial y, segundo,
acompañando a los camiones hasta el muelle de Poniente,
porque, tal y como informó un agente de la Policía Local
“durante el trayecto hay muchos indocumentados que
aprovechan cualquier detención del camión para introducirse
en él”.
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