El presidente de la Ciudad Autónoma, Juan Jesús Vivas,
ofreció ayer una temprana comparecencia para manifestar los
objetivos que la Administración se propuso trasladar al
titular de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera. Y todo
fue bien. Al menos fue lo que expuso el representante ceutí
a la hora de valorar el encuentro de 15 minutos con el
ministro socialista. Vivas se congratuló de la
“receptividad” de Caldera en temas como la ampliación de las
bonificaciones hasta el 50 por ciento de la Seguridad Social
o la petición de celebrar una reunión conjunta entre las
Áreas de Menores de ambos Gobiernos para tratar la
problemática de las repatriaciones.
Fue un encuentro “breve pero intenso” que puso de manifiesto
la voluntad de colaborar “más intensamente si cabe, en todo
aquello que signifique políticas encaminadas a favorecer la
integración, la cohesión social y atender a las personas más
necesitadas de Ceuta”, dijo el presidente.
Los convenios que se firmaron entre la Ciudad Autónoma y el
Ministerio de Administraciones públicas se ratificaron ayer
con el titular de Trabajo y Asuntos Sociales. En la
entrevista de ambos representantes salió a relucir la
necesidad de trabajar conjuntamente para “asumir
compromisos” y que los parámetros relativos a tasa de
ocupación, el índice de pobreza o la alfabetización en Ceuta
se equiparen a la media nacional.
El ministro no firmó en el libro de honor, ni pudo
celebrarse una reunión pero se comprometió a transferir la
dotación para menores en septiembre, permitirán desde Madrid
que Ceuta nombre a los directores del Imserso y el Inem. Así
que la Ciudad perdonó ayer a la Administración General del
Estado la “desconsideración” de no invitarlos a la cumbre de
Toledo. Aunque eso sí, queda pendiente la reunión para
tratar el tema de las repatriaciones de menores extranjeros
no acompañados desde la ciudad autónoma y la ampliación de
las bonificaciones a la Seguridad Social.
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