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A Carlos Orúe cuando se le pregunta después de un partido
por la labor del colegiado, siempre contesta que no habla de
los árbitros hasta que vea el partido en vídeo. El
entrenador del Ceuta atendió ayer a los medios, como es
habitual todos los jueves a la conclusión de los
partidillos, y preguntado si era más optimista después de la
buena imagen ofrecida ante el Águilas, pese a la derrota por
dos goles a cero, respondió que “cada partido es una
historia, pero conociendo las circunstancias del campo del
Águilas y las posibilidades del rival, éramos conscientes de
que teníamos opciones porque es un equipo al que se le podía
contrarrestar muy bien... En la charla previa al partido
comentamos que en el centro del campo íbamos a ser
superiores, pero debíamos tener cuidado con Tariq al que le
meterían balones en largo. Además es un campo pequeño donde
el público presiona al rival y al árbitro”.
Dicho esto, el jerezano ‘cargó’ con dureza contra Méndez
Caballero, que se erigió en protagonista en ‘El Rubial’ y
perjudicó con algunas de sus decisiones al equipo caballa.
Orúe dijo que “si me calentase podría llamarle de todo, de
impresentable para arriba... Después de ver el vídeo del
partido, estoy muy dolido”.
El técnico jerezano enumeró acto seguido los errores
cometidos por el colegiado andaluz, aunque antes hizo
referencia a un detalle que no le gustó en absoluto. “Cuando
sale al campo saluda al entrenador del equipo contrario,
algo que también lo ve nuestro vicepresidente, y comentamos
que no nos gusta el detalle... Y en el transcurso del
partido nos perjudica en todas las jugadas. Nos anula un gol
que es legal, en el primer gol de Águilas existe falta de
Tariq a Basauri, aunque la acción se produzca fuera del área
pequeña, porque el delantero va con el brazo por delante. En
el penalti que pita nuestro jugador está de espalda a la
portería y no ve el balón. Le saca una tarjeta amarilla a
Álex Hornillo cuando el Águilas va a lanzar una falta,
cuando todos conocemos como es Tariq, que se va de rositas
rompiéndole la ceja a Álex Hornillo. Y en el segundo gol que
nos anula de nuevo amonesta a un jugador del Ceuta, porque
aprecia una falta en el forcejeo con la barrera”.
Permisivo con el Águilas
Orúe continúa su monólogo contra el árbitro del pasado
domingo y asegura que “David Franch y Olivares tendrían que
haber sido expulsados por doble amarilla. En el descanso le
digo que tengo muchos amigos en el mundo del arbitraje, pero
ninguno me da nada y él a Pepe -se refiere al entrenador del
Águilas- le está dando mucho. Él me dice que estoy
amonestado y le pido que ponga en el acta el motivo de la
amonestación, me vuelve a insistir que estoy amonestado...
Lo de la segunda parte es increíble, le podría dedicar
muchos descalificativos, pero por la educación que tengo me
voy a callar. No creo que durmiera tranquilo ni debería
pitar mucho”, enfatiza el preparador del Ceuta.
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fútbol / segunda divisiÓn ‘B’,
GRUPO ‘IV’
