Más de 30.000 metros cuadrados son con los que van a contar
las nuevas instalaciones de la escuela de equitación y
deportes hípicos ‘Ciudad de Ceuta. Se ubicará en el García
Aldave, en la zona del Monte de Ingenieros donde la
maquinaria del cuerpo realizaba las prácticas, entre el CETI
y Calamocarro.
Las obras ya han comenzando, con un trabajo de allanamiento
por parte del mismo personal del cuerpo de Ingenieros, que
están utilizando en la zona la misma maquinaria del ejercito
para comenzar con el movimiento de tierras.
El presupuesto para la instalación asciende a un millón
ochocientos mil euros (1.800.000).
Todos estos datos, son la síntesis de un gran proyecto que
se va a cometer en Ceuta, para llevar a delante un proyecto
que en la mañana de ayer fue presentado,con todos los
honores en el Salón del Trono de la Asamblea de la ciudad,
por el presidente Juan Vivas, y por el General Luís Gómez
Hortigüela. Ejerció de maestro de ceremonias, Juan Antonio
García Ponferrada, técnico del ICD y un enamorado del mundo
ecuestre.
La historia del Aula Hípica
El fue el encargado de poner en antecedentes a los
asistentes al acto de cuanto rodea al mundo de la hípica.
Estos, tanto en Ceuta, como en el resto del mundo nacen en
el ámbito militar, y como bien expuso García Ponferrada, en
Ceuta las circunstancias hacen que esa ligazón sea mucho
mayor. Ya en los años cuarenta y una vez se intenta
recuperar esa tradición ecuestre en la ciudad.
Y fue a partir de 1991, con las nuevas obligaciones del
ejercito, surge una nueva formula de gestión del aula hípica
en la que se implica la ciudad, en el que se puede acceder a
la práctica de este deporte por todos lo ceutíes y no sólo
por un grupo reducido de aficionados, con un poder
adquisitivo mayor, como sucede en otras ciudades.
Pero los nuevos tiempos implicaron que el número de
militares en la ciudad se redujera y como bien definía en su
exposición el General Gómez Hotigüela durante la
presentación de este proyecto, cuando llega a la ciudad, a
cargo de la plaza de la Comandancia General, el jefe del
Estado Mayor del ejercito le planteó la premisa de unificar
en uno sólo espacio las instalacciones militares en la
ciudad. El lugar elegido fue Viña Acevedo, donde se ubicaba
el Aula Hípica.
En esta tesitura, se plantea la disyuntiva de tomar un nuevo
camino y en ese camino, las dos instituciones que soportan
el Aula Hípica, la Ciudad y la Comandancia General, firman
un convenio por el que los cerca de 300 alumnos con los que
cuenta la instalación no se van a quedar sin poder prácticar
su actividad. Tras barajar distintas posibilidades, se
decide que sea en el monte de Ingenieros. Para Goméz
Hortigüela, esta intalación tiene un futuro muy ilusionante
que auna a los estamentos civiles como militares.
El presidente Juan Vivas, en nombre del Gobierno de la
Ciudad y de la Asamblea agradeció la colaboración de todos:
“·Sin la determinate colaboración de Comandacia General y
que deja patente la estrecha colaboración entre las
instituciones”, aseguró Juan Vivas.
Así mismo, Vivas, agradeció la implicación de todos los que
han trabajado en el proyecto: personal del ICD y del Aula
Hípica. “ Este es un proyecto que no parte de cero, que
tiene unas bases sólidas, que hace de esta escuela la
segunda de toda España en número de alumnos”, señaló el
presidente. Además recalcó, al igual que lo hiciera el
General Gómez Hortigüela la singularidad de la instalación,
que no es modo alguno elitista: “Da cabida a toda la
sociedad ceutí, con independencia de su poder adquisitivo”.
Juan Vivas finalizó su alocución señalando que dado que se
ofertan determinados programas para chicos con diferentes
tipos de discapacides se puede hablar que el centro hípico
de Ceuta no sólo es un lugar para la práctica del deporte y
un espacio de ocio sino que presta una actividad de servicio
público.
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