La Convención del Partido Popular que finaliza hoy domingo
(con la intervención de Mariano Rajoy) ha dedicado un
espacio importante al debate de los flujos migratorios y al
modo en el que afectan a la economía española. El presidente
ceutí, Juan Jesús Vivas, destacó, en el discurso que
pronunció para comentar la situación de la Ciudad Autónoma,
la fuerte presión migratoria que sufre Ceuta por ser, al
mismo tiempo, extrapeninsular y frontera terrestre de Europa
en África. Por otro lado, Vivas quiso dejar patente que los
servicios públicos de la Ciudad Autónoma se ven desbordados
en muchas ocasiones a causa de la presión migratoria en la
zona, lo que provocaría desequilibrios funcionales y
estructurales en la gestión local y, por extensión, estatal.
Por su parte, Jaume Matas, presidente de Baleares, hizo un
análisis más general del fenómeno, concluyendo que los
procesos de regularización iniciados desde el Gobierno no
han servido para aclarar la situación, y han dejado a 1,5
millones de indocumentados con el mismo estatus de
irregulares.
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