Tambores y timbales, con sonidos propios de la Semana Santa,
entran en el Alfonso Murube, pero una voz pregunta si en su
repertorio no hay algo con más ritmo y la samba resuena por
todos los rincones del estadio, acompañada por las palmas de
los cientos de espectadores que presenciaron la inauguración
de los IX Juegos Deportivos del Estrecho.
Los verdaderos protagonistas de este evento, los niños,
entran en escena portando unas bengalas con las que dibujan
el contorno de las dos orillas del Estrecho y siete bolas de
fuego señalan el punto donde se sitúan las siete ciudades
que conforman este particular evento, donde competir y
convivir son los lemas a seguir bajo una sola bandera. |