PORTADA DE HOY
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POLÍTICA - VIERNES 7
DE OCTUBRE DE 2005 |
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Inmigrantes. CEDIDA |
POLÍTICA / VISITA OFICIAL DE LA
VICEPRESIDENTA PRIMERA
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Las ONGs piden seguridad y cumplimiento
de los derechos |
La
ministra portavoz, Fernández de la Vega, se reunió
con representantes de las ONGs para agradecerles su
labor e intercambiar posiciones
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CEUTA
Pedro García Luaces
local@elpueblodeceuta.com |
La ministra portavoz María Teresa Fernández de la Vega se
reunió con representantes de las distintas ONGs que operan
en la ciudad para conocer sus preocupaciones y la actividad
que desempeñan y transmitirles las líneas de actuación que
se ha marcado el Gobierno: “más seguridad, eficacia, respeto
a los derechos humanos y cooperación”. María Teresa
Fernández de la Vega ha transmitido a los representantes de
Cruz Roja, Cruz Blanca, CEAR y Media Luna la disposición del
Gobierno a devolver a los inmigrantes o grupos de
inmigrantes que cumplan con la serie de requisitos de
carácter extraordinario indispensables para hacerlo
efectivo, tales como la certeza absoluta del país de origen,
algo que en ocasiones resulta lo más complicado de
determinar.
León Bendayán, presidente de la Cruz Roja en Ceuta, ha
comentado la labor de los 26 trabajadores que aporta al CETI
y que desempeñan tareas de asistencia sanitaria y
psicológica, social y formativa. Su impresión es que los
inmigrantes no encuentran una tranquilidad total hasta que
viajan a la península, pero que no son conscientes de las
medidas que se manejan a nivel estatal. Francisco Correro,
vicario de la diócesis de Ceuta, cree que a los inmigrantes
sí les gusta estar preocupados de las actuaciones del
Gobierno y en qué medida les va a afectar. “El otro día, un
muchacho que llevaba 8 meses comenzó a llorar pensando en
que lo iban a devolver”.
Respeto a los derechos humanos
El Padre Aurelio, a la cabeza de Cruz Blanca, que
actualmente da cobijo a 44 inmigrantes, ha vivido ya
devoluciones de considerable dureza en el pasado. “En el
momento en que vinieron a por ellos se mantuvieron mansos y
resignados y todos ellos me decían: tranquilo papi”. El
franciscano valoró la afirmación de la ministra de que se
velará por cumplir con toda la legalidad y los derechos
humanos y que las devoluciones, de producirse, nunca serían
masivas. “Nos ha dejado tranquilos”, dijo. El padre Aurelio
no consideró que pudiesen formarse grupos de resistencia
ante el conocimiento de la reactivación del tratado con
Marruecos y afirmó que en los próximos días informarían de
la medida a los inmigrantes que acogen.
José Luis Pizarro, comisionado de CEAR planteó en la reunión
tres cuestiones que les preocupan. En primer lugar, el
convenio del 92 con Marruecos no les parece el más adecuado
pero de hacerse “ha de ser con todas las garantías legales y
asegurando que todos los inmigrantes sean devueltos a sus
países de origen”. En segundo lugar, Pizarro considera que
la Ley de Extranjería regula ya un procedimiento de
expulsión que no se pone en funcionamiento al ser solapado
por la reactivación del convenio. Por último, pide que se
respeten las peticiones de asilo, unas 60, para que estas
personas no sean devueltas.
En este sentido, el padre Aurelio resaltó la petición de la
ministra de informar correctamente a los inmigrantes de las
situaciones en las cuales pueden o no pedir asilo político,
para que este tipo de solicitudes no proliferen.
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“Sólo el sufrimiento puede empujarte a una cosa así”
Reactivado el tratado de readmisión con Marruecos que
permite la devolución “singularizada de inmigrantes ilegales
con todas las garantías”, según palabras de la
vicepresidenta primera del gobierno, María Teresa Fernández
de la Vega, el CETI de Ceuta despertaba ajeno a la noticia.
Algunos comprendían la llegada de una visita importante y lo
deducían del mayor cuidado y limpieza de las instalaciones.
La mayoría no conocía el carácter de las nuevas medidas del
Gobierno, unas medidas que podrían devolverlos a sus países
a pesar del calvario sufrido, pero una inquietud, mezcla de
curiosidad y desconfianza, se palpaba en el ambiente.
Frank es camerunés y lleva ya 8 meses en el CETI por lo que
entiende el español y bromea con el personal del centro. Es
menos reacio a hablar y parece bien informado, pero no tiene
ni idea de que las devoluciones son ahora posibles. Frank
confía en el Gobierno español, al que está muy agradecido,
pero no entiende que quieran devolver a algunos a su
situación inicial “¿Y los que están muertos, pregunta, quién
les va a dar una nueva vida?”.
Francis es de Sudán y aún tiene las heridas que se produjo
al saltar la valla fronteriza abiertas, sujetas con grapas,
en los brazos y las piernas. llegó el 29 de septiembre, un
día duro para muchos de ellos. Dejó su país en 2001 porque
estaba en guerra y no tenía familia, pero llama “brother” y
“father” a todos los compañeros que le rodean mientras les
palmotea enérgicamente el pecho. Habla serio y con gravedad,
aunque no debe superar los veinte años.
“En mi país no se puede vivir, dice. No quiero volver allí.
No tengo educación pero puedo trabajar”, asegura.
Francis y Frank (probablemente nombres inventados) pasaron
años en el bosque antes de decidirse a cruzar. “Sólo el
sufrimiento puede empujarte a hacer una cosa así”, dice
Frank.
Ninguno sabe que la persona que les visita es la
vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la
Vega, pero ambos se muestran interesados en la visita.
Cuando les informo de las posibles consecuencias de la
intervención del Gobierno no quieren ni oír hablar de volver
a ninguna parte. Si han de moverse, que sea hacia adelante,
hacia la península, el único lugar que garantiza y consuma
su libertad.
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