Pese a que la consejera de Educación reconoció ayer que se
ha visto obligada a tener que condenar cuatro habitaciones
de la Residencia de Estudiantes para que habilitarlas como
salones debido a las carencias que presenta, la propuesta de
urgencia presentada por los socialistas y defendida ayer por
José Antonio Carracao, relativa a la revisión del pliego de
condiciones de la misma, no prosperó, ya que la misma fue
tumbada con los 16 votos con los que ayer contaba en la sala
de sesiones.
En su propuesta, Carracao instó al Gobierno a la revisión
del pliego de condiciones de la residencia de estudiantes y
comprobar si se está cumpliendo con el mismo, exhortar al
mismo a aumentar los servicios que se prestan con el
objetivo de mejorar la estancia de los estudiantes. Estos
servicios deben de tener como mínimo el de lavandería,
comedor y cocina, concluían sus exigencias.
Mabel Deu estuvo a la defensiva con el asunto y contestó a
Carracao que el pliego de condiciones se hizo en el año
2013, advirtiéndole al socialista que era en esa fecha
cuando tendría que haber mostrado su total disconformidad
con el mismo y no hacerlo ahora. La consejera dijo a
Carracao que siempre ve las novelas que “quiere ver, en este
caso, de terror”.
El socialista no se amedrentó por lo dicho, respondiendo a
Mabel Deu que el único libro que lee y presenta es “el que
leen los ciudadanos”, en clara alusión a la cantidad de
carencias que presenta la Residencia de Estudiantes, que no
cuenta con cocina, lavadora y secadora. Este apartado fue
reconocido por la consejera, que manifestó que en el poyecto
sólo se contemplaban la construcción de cuarenta y dos
habitaciones y, además, “estamos en gestiones con la
Universidad de Granada para los bonos de comedores”.
Para Carracao, las excusas presentadas por Deu no “me siven
para nada”, argumentando que es la propia Facultad la que le
comunica que son muchas las deficiencias encontradas, tanto
en seguridad, limpieza, como en recursos. Una de sus mayores
reivindicaciones es el servicio de lavandería y de cocina.
No tienen para cocinar y todavía no se ha firmado un acuerdo
para que puedan acceder al menú de la cafetería de la
Universidad, a un precio razonable.
Aludiendo que los estudiantes no han podido disfrutar de una
sala de uso común hasta principios de enero, no tienen mesas
ni sillas para comer, carecen de televisión, las ventanas
están mal selladas y tienen filtraciones, no hay limpieza de
los elementos externos, existe una mala ventilación, no
disponen de estanterías para colocar objetos diversos que
comparten dentro del armario de la sala común, no tienen luz
en el pasillo durante los fines de semana, no conocen el
plan de evacuación, la empresa tarda siempre con las
reparaciones y no existe comunicación con la adjudicataria.
Acusaciones muy graves que la consejera capeó como pudo,
argumentando que los técnicos mantienen una actitud
vigilante y que supervisan el contrato desde el inicio.
Por ultimo, Carraco evidenció que estas carencias definen a
la perfección las políticas de este Gobierno, que abandona a
la juventud y no fomenta su formación, ni su
participación.Pagan para que encuentren trabajo fuera de
nuestra ciudad, encarecen los estudios, recortan en becas,
no amplían la oferta universitaria y no acondicionan las
instalaciones.
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