La movilización ha coincidido con un buen puñado de
novedades y declaraciones en torno a los sucesos del 6 de
febrero de 2014. Primero, la decisión del juez de la
Audiencia Nacional Fernando Andreu de mantener la causa en
el juzgado de Ceuta, cuya titular pretendía inhibirse del
procedimiento abierto para investigar la muerte de los
quince jóvenes, luego las de la viceprWesidenta del
Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quien aseguró que las
muertes de hace un año tenían un único culpable: las mafias.
Pero una de las reacciones más críticas ha sido la del
delegado del Gobierno, Francisco Antonio González.
El máximo dirigente del Gobierno en Ceuta siempre ha
mostrado su rechazo a politizar la tragedia ocurrida el 6-F
de 2014 y precisamente por ello tildó de “miserable” la
presencia de algunos dirigentes políticos en la marcha
celebrada ayer, indicando que con su participación
suscribían lo recogido en un manifiesto en el que se habla
de que hubo asesinatos.
González Pérez centra su crítica especialmente en el PSOE,
Podemos y Caballas, haciendo referencia incluso a Mohamed
Alí y Juan Luis Aróstegui, y les recrimina que hayan
suscrito un manifiesto donde se critica la labor de la
Guardia Civil.
“Las personas venidas de la península a la manifestación no
conocen el trabajo de la Guardia Civil en la frontera, pero
todos los que viven en Ceuta saben, porque los ven a diario,
cual es su trabajo y por lo tanto suscribir con su presencia
el manifiesto me parece miserable”, escribe González en su
facebook, donde también manifiesta que “todos sin excepción
lamentamos la pérdida de esas vidas humanas”.
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