Es lo menos que yo,
particularmente, puedo decir a una persona de orden que
viene a Ceuta y con quien estará garantizado el orden en
todo lo que sea competencia suya.
No sé si serán muchas las felicitaciones de bienvenida,
dejando de lado las puramente oficiales, que recibirá el
coronel José Luis Gómez Salinero, pero para todos los que en
la vida, en nuestro campo de actuación, consideramos el
orden como elemento básico, el tener cerca la persona que
será responsable de la Guardia Civil en Ceuta, ya es una
garantía y una seguridad plena.
Y yo valoro más todo lo que puede hacer José Luis Gómez
Salinero, porque en los tiempos que estamos viviendo son
muchos los que rechazan todo lo que nos hace sentirnos más
seguros, para luego alabar los “jolgorios”, las
indisciplinas y el llevar la vida de cualquier “macarra”.
Ceuta que, en muchas parcelas, tiene una situación muy
compleja, tendrá que, deberá de, apoyar totalmente lo que
aquí lleve a cabo el nuevo responsable de la Guardia Civil.
Y deberá respaldarlo, porque no se sabe cuando, pero en el
momento menos pensado, sin que Ceuta lo desee, se puede
encontrar con un problema no buscado, como sucedió en
febrero, y eso José Luis Gómez Salinero, en unos instantes,
con sus guardias civiles, deberá decidir como darlo la
solución más segura.
Luego, a toro pasado, los que tienen otro poder lo
interpretan de una forma, ciertas ong´s y muchos “macarras”
lo interpretan de otra, pero lo que suelen olvidar unos y
otros es que en esa intervención de la Guardia Civil, con su
coronel al frente, se han estado jugando ellos todo,
incluso, a veces, la vida, en muchas ocasiones, mientras
nosotros no nos hemos enterado de nada y mientras tanto al
jefe como a los demás guardias civiles les esperaban, en
casa, sus hijos, sus mujeres, sus padres y toda su familia.
En más de una ocasión he dicho esto y me consta que ciertos
seguidores de la “progresía barata” miran hacia otro lado,
porque es más “progre” hablar de fechorías, de felonías, que
vivir en una situación de orden.
José Luis Gómez Salinero es unos cuantos años más joven que
yo, pero es de los que, en sus años de niñez y de juventud
vivió el final de otro régimen y por su edad ha sabido salir
de aquella etapa para vivir y convivir el mundo que nos
rodea.
Me dicen que es tenaz y disciplinado, como no podía ser de
otra forma para actuar rectamente en su justo puesto, y
cuando el libertinaje y la publicidad engañosa, así como la
falta de seriedad se apodera de muchas áreas de la vida de
hoy su frase:”el miedo guarda la viña”, dice muy a las
claras que aquí los juegos sólo hay que tenerlos, en su
sitio, y a su tiempo, pero no en cualquier lugar y a la hora
que a cada uno le convenga.
Apoyo, pues, total, como el ministro de Interior Fernández
Díaz se lo está dando al jefe de la Guardia Civil de
Melilla, otro hombre que, frente a las vacaciones
bullangueras de muchos, en el verano, él ha tenido que
“bailar con la más fea” para poder cumplir digna y
rectamente, con su función.
Llegados a esto y dirigiéndome, especialmente, a ciertas
ong´s, lo único que les pediría es que atiendan sus asuntos
y dejen actuar en su terreno a los que saben, porque tanto
el jefe de la Guardia Civil de Melilla, como el nuevo
responsable de la Guardia Civil de Ceuta, saben y muy bien,
el terreno que pisan.
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