Una propuesta transaccional en la que intervino Juan Vivas
como presidente de la Asamblea para aclarar la situación,
puso el colofón a un debate intenso de una hora para
concluir de la siguiente manera: los expedientes de
empadronamiento que afecten a menores de 16 años de edad se
resolverán en positivo o negativo en el plazo de un mes,
siempre que la documentación aportada esté completa y sea la
adecuada conforme a los documentos que se requieren.
Previamente, la consejera de Presidencia, responsable del
área de Estadística, había defendido los controles que se
realizan para contrastar la información y el control de los
empadronamientos, debido a los casos irregulares que se
habían detectado. “Se piden los datos que exige la ley”,
dijo Bel.Y fue irónica: “¿Dónde pone que estamos obligados a
empadronar a quienes no viven en Ceuta?
La moción de Caballas formulaba una propuesta sobre el
procedimiento para la resolución de expedientes de solicitud
de inscripción en el Padrón Municipal de habitantes. Juan
Luis Aróstegui, que presentó la propuesta, inició su
intervención poniendo el ejemplo de un niño de 8 años que,
mientras sus amigos iban al colegio él tenía que quedarse en
casa. Durante 9 meses lloró que no pudiera ir a clase, ya
que certificado de empadronamiento, documento que la
Dirección Provincial del Ministerio ha convertido en
requisito inexcusable. Argumentó que el Gobierno podría
encontrar razones técnicas o circunstanciales para
justificar que se privara a un niño de un derecho
fundamental: la Educación.
Insitió el diputado de Caballas que en Ceuta es una aventura
inscribirse en el Padrón municipal y propuso crear un
aOrdenanza propia que regule el procedimiento de
empadronamiento y suponga un compromiso firme de la Ciudad
Autónoma. “No se puede utilizar la desesperación
administrativa en favor de un prejuicio”, señaló.
Yolanda Bel resaltó que ha mejorado en recursos este área,
dijo que los casos se resuelven en un mes y que hubo más de
2.200 bajas por inscripciones indebidas y se detectaron 400
personas en “pisos patera”, como consecuencia de los
mecanismos especiales que se habían puesto en marcha.
También se producen elementos de coordinación con el INEM y
con el aumento de número de efectivos de la policía Local y
Estadística para evitar demoras. “Hay personas que tratan de
engañar a esta Administración” dijo Bel y aludió a quienes
tratan de empadronarse fraudulentamente con contratos de
alquiler dudosos, con residencias que, tras visitarles están
en una nave industrial o un lugar que no existe. Y la
Administración los descubre. “Cuando nos mandan a una
dirección fraudulenta, se cierra el expediente”, dijo Bel.
”Hemos tenido casos de declaraciones juradas de personas
fallecidas. Estas situaciones penosas existen en nuestra
ciudad”, declaró.
Aróstegui ofreció un reto a Bel: “Si yo le traigo mañana
decenas de personas que llevan meses esperando su
certificado de empadronamiento, presente su dimisión”.
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