La intención del Gobierno de cubrir 29 plazas por el sistema
de libre designación de la que ha venido informando EL
PUEBLO también tuvo ayer su espacio en el debate del pleno
de la Asamblea. Fue el PSOE el que presentó una moción de
urgencia para instar al Gobierno a rechazar la práctica
generalizada de la libre designación y a garantizar que los
puestos de secretaria, interventor y tesorero se cubren de
forma “justificada”. El líder socialista, José Antonio
Carracao, alertó de que la libre designación en estos casos
puede condicionar al funcionario que ve como su cargo
depende de la voluntad política del Gobierno que le ha
puesto ahí y al que, por otro lado, debe fiscalizar. “La ley
establece la exigencia de que estos puestos sean cubiertos
por funcionarios con habilitación nacional, y nosotros
defendemos que dichos nombramientos se realicen en base a
criterios técnicos y justificados adecuadamente”, manifestó
Carracao.
Ante esto, la consejera que momentáneamente ha asumido la
responsabilidad sobre Recursos Humanos tras la baja de
Emilio Carreira, Susana Román, reiteró que la Ciudad tiene
claro que es un sistema excepcional y que por eso, de una
Relación de Puestos de Trabajo (RPT) en la que figurarán
unos 1.300 funcionarios, se extractarán 29 puestos de
trabajo para hacerlos de libre designación. Román incluso
llegó a decir que se trata de una cifra “casi irrisoria” y
acusó al PSOE de querer demonizar este sistema cuando, según
insistió, es habitual en todas las administraciones.
Por otro lado, Román defendió que estos puestos se están
negociando con las centrales sindicales, al igual que la RPT
y que todo ello se hará dentro de un “procedimiento reglado
y consensuado” con los sindicatos. La consejera quiso
matizar también que las personas que se acuerde designar
finalmente por este sistema “no serán de la calle”, sino
funcionarios de la administración local
Sin embargo, las explicaciones no convencieron a Carracao,
que insistió en que la libre designación en cargos con
responsabilidad para tomar decisiones podría comprometer la
“independencia” de estos funcionarios. Por su parte,
Caballas se pronunció para decir que antes de valorar la
situación esperará a que concluya la negociación sindical.
Finalmente, la propuesta de los socialistas fue tumbada por
el grupo popular, mientras que los miembros de Caballas se
abstuvieron de decantarse a favor o en contra.
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