La ordenanza de terrazas ha sido uno de los textos más
polémicos de la legislatura y el objetivo de Susana Román es
dar carpetazo al asunto consiguiendo el consenso de todos.
Para ello quiere introducir dos modificaciones importantes
en el texto relativas a horarios y toldos. Desde Fomento
están dispuestos a ceder con los horarios de cierre para
lograr el apoyo de los empresarios y además se va a permitir
la instalación de estructuras ligeras (toldos cerrados), que
hasta ahora estaban prohibidos. Una vez más, Román aseguró
que el objetivo es “adaptar la ordenanza a la realidad” y
por ello van a “abrir el abanico” para que tengan cabida
todas las terrazas de la ciudad.
La consejera no quiso adelantar ayer qué nuevos horarios se
manejan para introducirlos en la nueva ordenanza, aunque sí
señaló que se homogeneizarán con los que están vigentes en
la península, ya que en gran parte del país tienen los
mismos. Lo que sí especificó Román es que mantendrá la
variación de horarios entre periodo estival, de abril a
octubre, e invierno.
La consejera señaló que el texto para la modificación de la
ordenanza se encuentra “muy avanzado” y que se aprobará en
este cuatrimestre. Hasta el momento, la consejería ha
detectado más de 20 terrazas que no han solicitado licencia
de apertura. En total, se han enviado 48 cartas de aviso,
según informaban los técnicos la semana pasada.
Por otro lado, Román también explicó que se está trabajando
en una ordenanza “integral” de kioskos en el que se regule
la actividad de los mismos, pero también las de las terrazas
asociadas a estos puestos, en su mayoría de bocadillos, y
los horarios.
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