CCOO ha pedido que se garantice la libertad circulatoria por
territorio español a los inmigrantes que se encuentran en
Ceuta y Melilla y la prestación por desempleo a los
extranjeros que entran cada día a las ciudades autónomas a
trabajar cuando se queden en paro.
En un informe presentado ayer con motivo del Día del
Migrante, el sindicato relata las conclusiones de una visita
realizada a Ceuta y Melilla, el pasado mes de noviembre, a
las zonas donde se sitúan las vallas y a los Centros de
Estancia Temporal de Inmigrantes.
“Entendemos que la instalación de alambre dotado de
cuchillas en las vallas que perimetran tanto Ceuta como
Melilla no tienen un efecto meramente disuasorio, sino que
suponen un mecanismo con evidente intención de lesionar y
herir a las personas que pretendan saltarlas”, ha explicado
a Efe la secretaria de Empleo y Migraciones de CCOO, Paloma
López.
Respecto a la situación de los centros, que son
asistenciales y por tanto en régimen abierto y sin custodia
policial, ha denunciado “el hacinamiento” en el que viven
los inmigrantes, muchos de ellos esperando a que se
resuelvan sus peticiones de asilo.
“Hay varias familias procedentes de Siria que han pedido
refugio y que no pueden convivir juntas en estos recintos,
donde están separados por zonas masculinas y femeninas”, ha
indicado.
Según el autor del informe y asesor jurídico del sindicato,
José Antonio Moreno, la “responsabilidad de esta inaceptable
restricción de la libertad circulatoria corresponde a
Interior, que dilata la tramitación de los expedientes,
impidiendo tanto su salida como su llegada a la Península y
generando un efecto tapón, que colapsa los centros
prolongando artificialmente su estancia”.
Así, explica que el tiempo medio de tramitación de la
documentación en el CETI de Melilla es de un año y de algo
menos en el Ceuta, mientras que para los solicitantes de
asilo se han dado algún caso en el que se ha tardado hasta
cuatro años.
“La sensación es que se pretende desincentivar la solicitud
de asilo en estas ciudades”, ha opinado el asesor jurídico,
quien ha recordado que muchas de estas personas proceden de
países que han sufrido crisis humanitarias o políticas, como
Túnez, Egipto, Libia y Siria.
CCOO también ha denunciado la situación de los trabajadores
“transfronterizos” de nacionalidad marroquí que viven en
ciudades limítrofes con Ceuta y Melilla y trabajan en la
construcción, el servicio doméstico y la hostelería,
principalmente.
“Se les detrae de su nómina el descuento por desempleo pero
no se les reconoce el acceso a prestación alguna por tal
cotización, lo cual no sólo genera un incumplimiento de la
ley, sino incluso una apropiación indebida” de la
administración española, ha dicho la responsable sindical.
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