Cámara de Comercio y Confederación de Empresarios han
decidido unir sus fuerzas para defender los intereses de los
empresarios frente a la modificación de la Ordenanza fiscal
de la basura que prevé incrementos en la tasa de recogida de
residuos de hasta el 3.000% en determinados
establecimientos. El pasado martes, el pleno de la Asamblea
aprobó de forma inicial y por unanimidad modfiicar la
Ordenanza fiscal reguladora de la tasa de recogida de
residuos sólidos urbanos en sus artículos 8 y 10, que
afectan al sector empresarial.
Los dos organismos empresariales están trabajando en un
documento de alegaciones conjunto para analizar epígrafe por
epígrafe estas subidas que se han aplicado. Desde la Ciudad,
ya han manifestado su voluntad de revisar las tarifas. Así,
está previsto que la próxima semana los representantes
empresariales se reúnan con el consejero de Hacienda, Emilio
Carreira y los responsables de Servicios Tributarios para
llegar a un acuerdo y que las alegaciones que finalmente se
presenten sean aprobadas por la Ciudad.
Complementarios
El objetivo es “recortar” las tasa de basura y así lo expone
el presidente de la Cámara, Karim Bulaix. Para él, es
fundamental colaborar con la CECE. “Ambos organismos han
demostrado su fuerza y que son complementarios”, recuerda
tras la manifestación del pasado martes a las puertas del
Ayuntamiento a través de la cual consiguieron paralizar la
imposición de las tasas a las terrazas que tenía prevista
Hacienda y que ahora se llevará a cabo pero con cantidades
muy inferiores. “Los empresarios quieren que trabajemos de
manera conjunta y así lo haremos”, puntualiza.
Para Bulaix, con la modificación de la ordenanza que aprobó
el pleno “no se logra una justicia distributiva”. El
presidente de la Cámara denuncia que “al empresario le
aumentan todo tipo de gastos y este se ve afectado hasta el
punto que se pone en peligro el trabajo que genera.
Por su parte, el presidente de la Confederación de
Empresarios, Rafael Montero Ávalos, reivindica que la tasa
de basuras no se incremente de forma generalizada. No es lo
mismo un bar, que un cine, un comercio o un hotel, hace
hincapié Montero Ávalos para añadir: “Hay tasas que se han
incrementado hasta un 3.000% y habrá que rebajarlas”.
Además, el presidente de la CECE señala cómo no se puede
imponer una tasa tampoco por el tipo de actividad sin tener
en cuenta el tamaño de los negocios porque perjudicaría y
ahogaría a los más pequeños. Para, la patronal es importante
que este impuesto se rija por la cantidad de basura que se
genera, pero también por otro tipo de variables que logren
reflejar la realidad del establecimiento, así como
establecer una tasa asumible para el mismo.
Otro de los cambios que aprobó el pleno es que las empresas
pagarán la tasa por la recogida de residuos sólidos urbanos
cada dos meses y además esta se incluirá en el recibo de la
luz, como ocurre con el resto de ciudadanos. Esta es una
manera de asegurarse el cobro y así lo señalan los
empresarios. No obstante, este cambio no se pondrá en
cuestión en las alegaciones. Cámara y CECE se reunirán esta
semana para matizar el texto.
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