El director general de la Policía, Ignacio Cosidó, informó
ayer de que se está trabajando en la realización de un Plan
Estratégico para “los próximos cuatro años”, que supondrá un
“instrumento estratégico que permitirá, por un lado, la
transformación del Cuerpo Nacional de Policía para hacer la
institución más eficaz y capaz de responder a los nuevos
retos”, y por otro, “que España sea un país más seguro”.
Cosidó resumió durante el discurso de inauguración de las
jornadas de la Unión Federal de Policía (UFP), algunas de
las cuestiones que se van a incluir en este plan: la lucha
contra el terrorismo, la lucha contra el crimen organizado,
la ciberseguridad, la Policía de fronteras y la lucha contra
la inmigración irregular, la seguridad ciudadana, la
atención a los grupos especialmente vulnerables, el auxilio
y la ayuda humanitaria, la seguridad económica y el comercio
seguro.
Fronteras e inmigración
Cosidó habló acerca de las cifras de inmigración ilegal y
anunció que la actuación policial está encaminada “tanto a
la mejora efectiva de las fronteras, como a la mejora de la
gestión de las repatriaciones”. Así, el objetivo es
“modernizar las infraestructuras de control fronterizo para
desarrollar las denominadas fronteras inteligentes” además
de “prevenir la inmigración irregular a través de la
cooperación con los países de origen, de tránsito y de
destino”, junto con la “actualización de infraestrucutras y
la mejora de los procedimientos de gestión de los centros de
intermaniento de extranjeros”. Por último, el director
señaló en su intervención que “la estabilidad y la seguridad
de Marruecos es fundamental para toda Europa y debemos
reconocer que la colaboración de la policía marroquí,
especialmente en la vigilancia de nuestras fronteras
comunes, está resultando fundamental para contener la
creciente presión migratoria”. “Tengo la certeza de que la
colaboración policial entre España y Marruecos nunca ha sido
más intensa que ahora”, aseveró el director general de la
Policía.
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