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Fiscalía solicita dos años de prisión para el acusado de
atacar a uno de los hombres que habitualmente cambia dirhams
por euros junto a la Jefatura Superior de Policía. El
imputado discutió con la víctima a la que propinó un golpe
que le desplazó el ojo de su órbita. El juicio se celebró
ayer en el Penal número dos y ha quedado visto para
sentencia.
El 7 de julio de 2010, K.B. llegó a Ceuta para ir a la
sucursal del Santander. En su camino se cruzó con los
cambiadores de dirhams que se ubican al lado de la Jefatura
Superior de Policía Nacional, en el Paseo de Colón e inició
una discusión con uno de ellos que ayer le llevó al
banquillo de los acusados del Juzgado de lo Penal número dos
imputado por un delito de lesiones. Durante su declaración
no quedó claro si los incidentes sucedieron antes o después
de acudir a la sucursal del banco a retirar efectivo. Aunque
en la fase de instrucción aseguró que los hechos pasaron
cuando se dirigía al banco, ayer el acusado aseguró que fue
tras sacar dinero y que dos ‘cambiadores’ intentaban robarle
cuando se defendió. Uno de los hombres que cambian dinero
sufrió una protopsis parcial (desplazamiento del ojo hacia
delante) y el otro recibió un empujón cuando trataba de
mediar. Por un delito de lesiones y una falta, Fiscalía
solicita dos años de prisión y multa de 600 euros, además de
que se indemnice al herido de mayor gravedad con 12.873
euros y al compañero con 150 euros.
Por su parte, la víctima que salió más perjudicada, explicó
que el día de los hechos ofreció al acusado la posibilidad
de cambiar y que este directamente le insultó. Según contó
el afectado, un hombre que supera los cincuenta años, el
imputado salió del coche hasta en dos ocasiones creando un
atasco en el paseo de Colón. Por ello, la víctima explicó
que se iba a acercar a el para pedirle que se fuera cuando
presuntamente el acusado se abalanzó contra él con algo
punzante que le dio en el ojo. “Sentí como un dedo y el ojo
me llegaba hasta la boca”, aseguró. Su compañero señaló que
en ese momento se acercó para intentar mediar y que también
salió mal parado. Aunque negó haber visto al acusado con un
objeto punzante en las manos. El forense explicó que la
protopsis también puede ser consecuencia de una acumulación
de sangre en la parte posterior del ojo tras recibir un
puñetazo.
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juicio
