Por la misma vía que hicieron los ya ex-directores de
Atención Primaria, Juan Carlos Mata y Milagros Corrales, a
través de una carta. El director territorial del Ingesa,
Fernando Pérez-Padilla, dio lectura ante los medios de
comunicación a una misiva en respuesta a Mata y Corrales.
“Sobre una decisión [la de su cese] que tomé yo
personalmente”, apostilló.
“Los ceses de los ya ex-directores de Primaria han venido
motivados por la crítica continua que han manifestado en
contra de la toma de decisiones que eran competencia
exclusiva de esta Dirección Territorial. Estas críticas las
han hecho tanto en el seno de la institución como
públicamente, con carácter oficial mediante escritos
dirigidos a la Gerencia para su posterior emisión a la
Dirección Territorial. Lo que supone la constatación
irrefutable de su total alejamiento de las directrices del
equipo directivo. Inevitablemente tenían que ser sustituidos
por otras personas que se identifiquen con la línea de
trabajo emprendida por el actual equipo y comiencen a sumar,
por el buen funcionamiento de la Institución y por la mejora
en la calidad de las prestaciones que se ofrecen al usuario
en estos tiempos tan difíciles, y que es nuestra mayor
preocupación”. Esta fue su carta. Según Pérez-Padilla, las
reivindicaciones de Mata y Corrales eran sobre asuntos
“fuera de sus competencias”, llevando la contraria “a sus
superiores”. “Usted es director médico, no director
territorial”, insta a Juan Carlos Mata.
De hecho, uno de los asuntos de controversia fue los
cuadrantes del SUAP, como Mata y Corrales refirieron en su
carta. “Los cuadrantes del SUAP son un problema porque lo
tenían que haber arreglado antes, yo di instrucciones y no
lo hicieron. Si yo doy unas instrucciones se tienen que
cumplir y si no están de acuerdo, pues se tienen que
cumplir, no pueden estar por encima de las decisiones que da
la Dirección Territorial; el director médico no le puede
llevar la contraria a todo el mundo, debe hacer lo que se le
dice y si no terminan las cosas como han terminado”, apunta
Pérez-Padilla. El pasado mayo, los dos directivos
presentaron su dimisión al director territorial, una
destitución que finalmente no se llevó a cabo. “Yo sí acepte
su dimisión”, defiende Pérez-Padilla. A dicha afirmación, el
director territorial fue cuestionado sobre si entonces
fueron directivos por encima suya quienes decidieron no
aceptar las dimisiones, a lo que Pérez-Padilla dice: “No
contesto”. “¿Por qué siguieron después? Porque yo soy una
persona tolerante, ellos se precipitaron fruto de la
inexperiencia, pero decidí volver a confiar en ellos”.
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