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ACTUALIDAD - MIÉRCOLES, 12 DE DICIEMBRE DE 2012


colas en la n-352. fidel raso.

frontera
 

Los colapsos se reproducen en la frontera por afluencia de porteadores y controles

Entre las causas de la acumulación de personas y vehículos a la entrada están la venta ambulante y estacionamientos indebidos

CEUTA
Tamara Crespo

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Tras un año de relativa tranquilidad en cuanto a los atascos en la entrada de la frontera, en los últimos días se reproducen a distintas horas, tanto por la mañana como por la tarde, los colapsos de peatones y vehículos. El lunes la causa era la afluencia de porteadores y ayer, también controles de documentación, pero hay otros factores que propician estos problemas.

La frontera del Tarajal sufre estos días de nuevo problemas de colapso a la entrada por distintos motivos. Según se explicó desde la Jefatura Superior del Cuerpo Nacional de Policía, el atasco de vehículos registrado hacia las 09.00 horas de ayer se debió a un “control de seguridad”.

No obstante, el día anterior, fue necesario recurrir a refuerzos de la UPR para controlar la situación al producirse otros “agolpamientos”, en este caso, de peatones, en el paso fronterizo. Este tipo de aglomeraciones se dieron en concreto a las 13.30 horas y también por la tarde, a las 18.20 y a las 20.50 horas, según los datos facilitados por el CNP. De forma puntual, esta acumulación de personas que tratan de cruzar a pie genera también dificultades en el tránsito de vehículos, tal como reconocen las mismas fuentes.

Durante la tarde de ayer este diario comprobó que la situación se reproducía, con aglomeraciones de gente en las puertas del paso fronterizo. Algunos porteadores tratraban de ‘colarse’ por la zona reservada para el tráfico rodado, al estar abarrotadas las ‘jaulas’ de peatones.

Según fuentes del CNP, hay otros factores que contribuyen a generar estos atascos. Entre ellos, y además de controles que realiza también la Guardia Civil, están los estacionamientos indebidos en la rotonda de acceso a la frontera, que dificultan la circulación de autobuses y otros vehículos. También se produce aglomeración de personas por la venta ambulante en la zona, que incumple las ordenanzas municipales. La Policía Local debería encargarse del control de ambas situaciones, y de hecho, el superintendente de este cuerpo, Ángel Gómez, señalaba hace apenas unos días en declaraciones a este diario que a petición expresa del CNP se había desplazado “de inmediato” una unidad al puesto fronterizo por las tardes, aunque ayer no se observaba presencia alguna de policías locales en la zona.
 

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