El delegado del Gobierno, Francisco Antonio González, estima
hasta en un 20% el volumen del fraude en las bonificaciones
al transporte de personas que no tienen derecho a estos
beneficios por residir realmente fuera de la ciudad o no
hacerlo el mínimo de 180 días previstos en la ley, un fraude
que extendió a la declaración del IRPF. “Si sumáramos todo
lo que se obtiene con subterfugios en esta ciudad nos
llevaríamos las manos a la cabeza”, aseguró ayer González
Pérez durante la rueda de prensa ofrecida para analizar los
Presupuestos Generales del Estado (PGE), en los que informó
de que las deducciones en el IRPF suman 35 millones de euros
y las subvenciones al transporte 9,8 millones.
El delegado destacó que en estos Presupuestos se mantienen
las partidas “suficientes” como para atender las
bonificaciones al transporte aéreo y maritimo, el 50% del
importe del billete. Esto es así, “a pesar de que hay
interés en generar dudas acerca de si se va a mantener o
no”, aseveró. González quiso hacer una “afirmación rutunda”
al asegurar que “si no hay fraude, se va a mantener” esta
bonificación. “Si los ciudadanos de Ceuta, y las
instituciones y los partidos políticos se comprometen a que
el fraude existente desaparezca no va a haber reducción del
50%”, insistió. Ahora bien, el delegado entiende que las
reducciones “se pueden hacer porque no haya capacidad
suficiente con la dotación presupuestaria que haya para
atender a todo lo que no sea legal; ya está bien por favor
de oír a personas defender cosas que están fuera de la
legalidad”, pidió.
“No se va a suprimir el plus de residencia, ya está bien de
bulos, insidias, calumnias, si no tienen capacidad de
transmitir a los ciudadanos proyectos, que no mientan para
tratar de captar su atención, no puede ser esta la ciudad
del bulo”, argumentó el delegado, que considera que estos
“bulos”, generan “inquietud, desasosiego, incluso
pensamiento de emigrar de la ciudad”.
También se refirió el representante del Gobierno de la
Nación a la previsión de un anticipo para la compensación
por menor recaudación del Ipsi, que va a significar a la
Ciudad “un ahorro de 200.000 euros en intereses”.
Las deducciones por residencia (50% en la declaración del
IRPF) suman 35 millones y el delegado confía en acabar “con
muchas de ellas porque son fraudulentas ya que no están
residiendo en nuestra ciudad”. “A pesar de los escépticos
esta es una batalla que se va a librar y que espero ganar en
beneficio de los ceutíes porque si se reduce el fraude habrá
más para otras cosas”, afirmó
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