El director territorrial del Ingesa, Fernando Pérez-Padilla,
calcula que en aproximadamente un mes se trasladará el
Centro Coordinador de Urgencias (CCU), de su actual
ubicación en la avenida Otero al Hospital Universitario, en
concreto al espacio que estaba destinado a la guardería. El
centro infantil no podrá abrirse porque el espacio es muy
pequeño y la cifra de niños que se podrían atender no
resultaría rentable para ninguna empresa privada. En cuanto
al CCU, el Ingesa va a adquirir un nuevo repetidor y una
antena para lograr una mayor cobertura. El Ingesa ya
trasladó al Hospital el servicio de ambulancias.
El Ingesa (Instituto Nacional de Gestión Sanitaria)
trasladará el Centro Coordinador de Urgencias (CCU) del 061,
desde su actual ubicación en la avenida Otero hasta el
Hospital Universitario de Ceuta, del mismo modo que hizo
hace casi un año con las ambulancias del servicio de
emergencias. Tal como confirma a EL PUEBLO el director
territorial del Ingesa, Fernando Pérez-Padilla, este es uno
de los principales proyectos que plantea realizar el Ingesa
a corto plazo.
El director territorial prevé que el traslado, que será por
cuestiones “técnicas”, pueda llevarse a cabo en
aproximadamente un mes, a no ser que se encuentren con
dificultades técnicas del sistema informático, que se
ampliará con una serie de equipos que hay que adquirir
fuera. “Los servidores ya han cumplido con su plazo y
tenemos que poner unos servidores nuevos; además este
edificio no es nuestro y tiene una serie de problemas
arquitectónicos como la falta de ventilación e iluminación”,
explica Pérez-Padilla, quien agrega que “quizás sea este el
momento de cambiar todos los servidores y llevarlos al
Hospital”. “De todos los sitios que hemos visitado, el
Hospital es el que creemos que reúne las mejores
condiciones, y no sólo lo creemos, hay un informe de
telecomunicaciones que así lo refleja”, explica el director
territorial.
El espacio elegido para ubicar el CCU es junto a la
cafetería, las instalaciones que estaban reservadas para
abrir la guardería. El pasado mes de mayo, tal como recogió
entonces este medio, la directora de Enfermería de Atención
Especializada, Carmen Gutiérrez, adelantó que el contrato de
gestión 2012, que se estaba definiendo en aquel momento,
contemplaría la apertura de la guardería. Finalmente la
institución sanitaria optó por no incluirlo en el documento,
por lo que la apertura del centro infantil se retrasó. “La
guardería no se puede abrir porque el espacio que hay
contemplado para la guardería es pequeño y admitía pocos
niños, unos 18 o 20 como máximo, y mantener esa cifra
supondría un coste muy elevado por persona, unos 300 o 350
euros, así que ninguna empresa privada se quiere hacer cargo
de esa licitación porque no la ven rentable, y los
organismos públicos, de momento, no pueden hacerse cargo de
subvencionar esa guardería; además, la ciudad ya tiene sus
guarderías y de momento no se ve la necesidad”, explicó
Pérez-Padilla.
El director territorial también explicó que se va a comprar
un repetidor y una antena para dar mayor cobertura, aunque
aún están pendientes de saber su ubicación.
Proyectos a largo plazo
Este será el principal proyecto que el Ingesa lleve a cabo a
corto plazo. “Llevar a cabo un proyecto significaría mermar
otros servicios, hay muchos en estudio, pero siempre nos
encontramos con dos problemas: las dificultades económicas y
las condiciones laborales de los trabajadores”, explica
Pérez-Padilla. “Las condiciones laborales son un derecho que
para cambiarlo necesitamos una serie de condicionamientos,
tanto jurídicos como legales comoo acuerdos sindicales, que
son difíciles de levar a cabo. Todos son proyectos a largo
plazo”, añade.
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“Optimismo” para afrontar el nuevo curso, pero también
“preocupación” por las medidas que obliga a tomar el
Ministerio de Sanidad
El Ingesa afronta el nuevo curso
con “optimismo”, según reconoce el director territorial,
Fernando Pérez-Padilla. Pero también lo inicia con
“preocupación”. “En un primer balance vemos que los números
van saliendo, y eso es positivo”, sostiene el director.
“Pero con preocupación también porque la medidas que hay que
tomar suponen a veces despidos, recortes, no en derechos
porque la Constitución lo prohibe, pero sí en medidas
agraciables que se daban antes y que ahora al no disponer de
recursos económicos suficientes hay que ir recortando”,
añade Pérez-Padilla. En esa línea, el objetivo principal de
la institución sanitaria para los próximos meses es que la
calidad asistencial “no se vea mermada”. “Hay muchos
problemas, muchos conflictos, que han derivado de la propia
asistencia que van surgiendo día a día, esto no es algo que
vaya solo, esto es como una casa, continuamente hay que ir
reparando los desperfectos, y dándole solución a estos
sucesos que van ocurriendo y que pueden mermar la calidad
asistencial, por lo que se requiere un esfuerzo importante”,
apostilla el director territorial. Uno de los trucos para
llevar esto a cabo es, según Pérez-Padilla, “innovar y
buscar alternativas” para con el mismo gasto, generar “una
mayor calidad”. Para concretar estos objetivos, el director
asegura que hay muchos proyectos entre el equipo directivo y
los trabajadores. “Proyectos hay muchos pero la viabilidad
depende siempre de un fondo económico, que es el muro con el
que nos encontramos”.
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